Los radares de tramo se instalarán en ochenta kilómetros de la CL-615

A falta de que la DGT lo confirme oficialmente, y si no se producen cambios de última hora, la línea verde pintada desde hace meses paralela a las líneas exteriores de la carretera CL-615, que une Palencia con Guardo, los conocidos radares de tramo, se extenderán durante 80 kilómetros. El primer tramo arranca en Palencia, en el punto kilométrico 1,706 y abarca 32,8 kilómetros hasta Carrión de los Condes, en el punto 34,600 de la CL-615. Desde el municipio carrionés, otro tramo controlado ocupa 11,5 kilómetros, hasta el punto 49,864 en Renedo de la Vega. En dirección contraria, de Guardo a Palencia, figura un radar de tramo en 11,5 kilómetros, entre Renedo y Carrión, en el mismo que de ida, es decir, que se lee la matrícula tanto de los que salen como de los que entran. Finalmente, hay otro tramo controlado de 23,1 kilómetros entre Villoldo y Palencia.

La velocidad máxima media estimada para cada tramo estará en 110 kilómetros por hora, si bien este extremo está pendiente de confirmación por parte de la DGT.

Esta medida afectará también a la CL-613 que une Palencia con Sahagún (León). La Junta de Castilla y León ha invertido 235.000 euros en estas medidas de control de la velocidad.