Palencia ya tiene nuevas directrices para el reparto de los Planes Provinciales

Las directrices de los Planes Provinciales para los años 2018 a 2021 se han aprobado este jueves con los votos del PP, el PSOE y Ciudadanos. La unanimidad no se logró por la abstención de Ganemos. Las principales novedades, a propuesta de los grupos Popular y Socialista, son un aumento del porcentaje del coste de la pavimentación en las obras de ciclo hidráulico, pasando del 25% al 40%; la introducción, dentro de las tipologías de proyectos, de las obras de mejora de accesibilidad, y la obligatoriedad de delegar las obras solicitadas por los ayuntamientos cuando el importe sea inferior a 50.000 euros.

Otras novedades son el carácter bienal de la convocatoria con el objetivo de dotar de una mayor flexibilidad y eficacia a los Planes; incrementar en la próxima convocatoria un mínimo del 15% la cantidad total correspondiente al tramo fijo de población; introducir un nuevo criterio en la asignación económica que incluye las bajas en la contratación de los planes de la convocatoria anterior, aunque se mantiene la posibilidad de solicitar la reinversión de la baja en lugar de su acumulación; y la incorporación de un margen del 10% cuando haya un descenso de población. Estas novedades fueron expuestas y defendidas por el diputado del PP Urbano Alonso.

El portavoz de Ciudadanos, Juan Cruz Vidal, ofreció un panorama positivo de las directrices, excepto en el punto referido a las participación de las mancomunidades en los Planes Provinciales. Vidal no comparte el criterio de que para pedir obras, todos los ayuntamientos tengan que acordar en sus plenos que, en el caso de impago de la obra, asumen el coste que les corresponda, lo que supone un agravio para estas entidades. El edil considera que con pedir a la mancomunidad un aval que garantice el pago seria suficiente. Por esta discrepancia, este portavoz anunció que votaría en contra.

Por su parte, Félix Iglesias, de Ganemos, valoró los «criterios objetivos» que se aplicarán por la equidad que supone en el reparto de los Planes. Sin embargo, señaló que le enfrenta el espíritu de los Planes Provinciales, en el sentido de que, en su opinión, la Diputación no debe intervenir en las decisiones de los ayuntamientos, como ocurre con el actual sistema. También abogó por que las cantidades que reciben los municipios se entreguen como fondos incondicionados para que decidan las inversiones y servicios en los que quieren gastarse el dinero.

El más entusiasta con las nuevas directrices fue el portavoz del PSOE, Miguel Ángel Blanco. Aunque se mostró partidario de un modelo en el que se primen los fondos incondicionados «los ayuntamientos son los que mejor conocen sus problemas y necesidades», dijo, y abogó porque el 25% de los Planes se entreguen de esta forma, reconoció que el acuerdo alcanzado ha mejorado el anterior, que pactaron el PP y el PSOE en 2009 cuando eran los únicos partidos representados en la Diputación. Blanco, además, intentó convencer al portavoz de Ciudadanos para que apoye el acuerdo, asegurando que las objeciones que planteó Vidal sobre las mancomunidades no debían restar su apoyo. «Todos los partidos que tenemos alcaldías debemos aprobar las directrices porque son positivas para los municipios», aseveró.

Finalmente, Juan Cruz Vidal apoyó el acuerdo con un «a favor» que denotaba ese cambio de voto. «¡Anda que si me abstengo yo!», expresó irónicamente el portavoz socialista como forma de agradecer el voto, lo que generó las risas entre los corporativos.

Una vez celebrada la votación, la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, intervino para señalar que las directrices que se acababan de aprobar «respetan dos principios que son compatibles: la autonomía municipal y la solidaridad interterritorial entre los ciudadanos para mejorar los servicios básicos».

Armisén destacó también la incorporación de obras de accesibilidad, de las que dijo que son una prioridad para la Diputación. «Queremos que sean un principio transversal», insistió. Por último, destacó el acuerdo porque «ofrece estabilidad a los ayuntamientos en las inversiones de la provincia».