El Concurso de Raza Churra de Anche reúne a 150 ovejas de 22 ganaderías

La Feria de Raza Churra 2017 de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Ovino Selecto de Raza Churra (Anche), que patrocina la Diputación de Palencia, ha arrancado este sábado en el Mercado de Ganados ubicado en la Carretera Vieja de León, en el barrio de Allende el Río, con el XXX Concurso Nacional de Ganado Ovino de Raza Churra, que congregó a 150 ovejas (machos y hembras mayores de 2 años, de 1 a 2 años y menores de 1 año) de 22 ganaderías de Palencia, Burgos, Valladolid y Segovia, y con otros como el de calidad de la leche de oveja churra; de inseminación de la raza churra, de cantidad de leche ordeñada (la oveja ganadora, de la ganadería S.A.T.Bonisa de Mayorga de Campos, consiguió 524 litros de 199 días de ordeño), de calidad del lechazo churro y de fotografía de raza churra.

«Intentamos es poner en valor nuestra raza churra. En los últimos años se está produciendo una bajada importante del número de cabezas y lo que pretendemos, a través de esta feria, es ver las características especiales de esta raza. Hoy por hoy, no estamos tan lejos en cuanto a producción respecto a otras razas que en los últimos años nos han ido quitando espacio dentro de la región, y además no hay nadie que pueda cuestionar la gran calidad que tienen nuestros productos, empezando por nuestro lechazo, que además de ser el mejor a nivel regional, desde el punto de vista gastronómico es una auténtica joya y deberíamos todos concienciarnos para mimarle, ya que corremos el riesgo de que, tarde o temprano, desaparezca», señala el presidente de Anche, Eduardo Páramo, que inauguró la feria acompañado por el vicepresidente de la Diputación de Palencia, Luis Calderón, y el subdirector general de Medios de Producción Ganadera, Arnaldo Cabello.

«La raza churra tiene diferencias fundamentales con otras. Tiene una grasa infiltrada en el músculo muy superior a la del resto de los lechazos, eso le hace diferente. Hace que la carne sea mucho más jugosa, más suave y digestiva. Por más que muchos se empeñen en decir que todos los lechazos son similares, estos son diferentes, y tienen una característica fundamental, que al ser raza autóctona, se crían casi al 100% con leche de la propia oveja, a diferencia del resto de los lechazos, que muchas veces se crían con leche en polvo. El modo de crianza también es diferente», agrega Eduardo Páramo, que estima en torno a las 400.000 el número de cabezas que hay en la región.

«Palencia ocupa el segundo lugar en el rango de importancia en cuanto a la aportación de ganaderos, después de Burgos, que es la que más ganaderos y cabezas aporta», incide el presidente de Anche, que engloba a 199 ganaderos de toda la región, «cuando en 2006 o 2007 llegamos al máximo nivel, más de 270».

«La actividad ganadera en sí es menos atractiva, el relevo generacional es imposible dadas las condiciones de trabajo que tenemos, y también influye la competencia de otras razas, que ha sido muy importante. La Assaf o la Lacaune nos han ido comiendo terreno, y hay ganaderos que antes tenían churra y se han pasado a este tipo de razas porque en principio producen más cantidad de leche», subraya Páramo, que recalca que «no siempre la mayor producción de leche hace más rentable la explotación».

«Es más importante el factor ganadero, hay ganaderos que hacen rentable a la raza churra tanto más que la assaf o la lacaune. Hay que tener muy claro, cuando hablamos de rentabilidad, que se incluyen todos los factores que tienen incidencia a la hora de calcularlo. No basta con la cantidad de producción de leche, hay que hablar de cuantas veces paren a lo largo del año, de los lechazos que paren, del precio de los lechazos, de la calidad de la leche... Hay muchas ratios a tener en cuenta, Hay que tener en cuenta también la durabilidad de las ovejas, todo eso incrementa los gastos. El hecho de que la raza churra se busque la vida en el campo abarata los costes de producción. Cuando hablamos de rentabilidad, hay que tener en cuenta muchos factores, no solo viene medida por la cantidad de leche que tiene», puntualiza Eduardo Páramo.

«Ha habido años en que hemos estado muy lejos en niveles de producción, pero gracias a la selección que mantenemos en Anche, hemos acortado esas diferencias e intentado que la calidad de esta oveja no desaparezca. En nuestro esquema de selección, queremos mantener que la calidad de leche no se pierda, la proteína viene fijada por la raza y la raza churra tiene un índice superior en proteína a otras razas», comenta el presidente de Anche.

En cuanto al futuro de la raza churra, «el gran reto es hacer compatible la actividad ganadera con la calidad de vida. Si no ofrecemos que el ganadero tenga también unas condiciones mínimas de calidad de vida, es difícil que los jóvenes apuesten por esta actividad. Hay que conseguir que sea rentable para contratar mano de obra, que los precios de los lechazos sean mejores, y que el precio de la leche se recupere a los niveles de hace un año», concluye Eduardo Páramo.