Los cambios en la normativa del casco histórico, pendientes de un informe de Patrimonio
El Ayuntamiento debe remitir un documentación en la que justifique con mayor profundidad la necesidad de modificar el PGOU
José maría díaz
Miércoles, 27 de enero 2016, 11:05
La tramitación del cambio en el Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Antiguo de Palencia, que figura en el Plan General de Urbanismo, aún permanece sin aprobarse definitivamente, al no haber recibido aún el informe favorable de la Comisión Territorial de Patrimonio, que depende de la Junta de Castilla y León.
Tras la aprobación inicial por parte del pleno municipal, en la última sesión del pasado mandato, el Ayuntamiento remitió los cambios previstos en la normativa de protección del casco antiguo de la ciudad a la Comisión de Urbanismo, con el fin de conseguir el informe favorable, para poder continuar con la tramitación. Sin embargo, el informe no llegó y este organismo dependiente de la Junta demandó al Ayuntamiento más documentación, justificando con mayor profundidad los cambios previstos en el planeamiento urbanístico de la zona centro de la ciudad.
Los servicios técnicos municipales se encuentra en estos momentos elaborando esa justificación de los cambios en el plan de protección del casco antiguo, aunque ya han elaborado un primer borrador, con el objetivo de remitir en las próximas semanas el informe definitivo, con el fin de que sea examinado por la Comisión Territorial de Patrimonio. «Se está trabajando despacio, porque queremos que la justificación sea lo más completa posible, para poder superar este trámite y poder continuar con la tramitación del expediente», explicó ayer la concejala de Urbanismo, María Álvarez, quien reconoció que en estos momentos «la pelota está en el tejado del Ayuntamiento», aunque indicó que en un breve plazo de tiempo se tiene previsto dar traslado de la documentación requerida. «Confiamos en que con este nuevo informe podamos recibir el visto bueno favorable de Patrimonio y volver a traer al pleno la modificación, para que pueda aprobarse de forma definitiva, ya que se trata de cambios imporantes para dinamizar urbanísticamente el casco histórico de la ciudad», explicó la concejala.
El objetivo de esta modificación, a la que se han opuesto reiteradamente grupos como el PSOE y Podemos, se plantea desde el equipo de gobierno del PP como una necesidad para revitalizar el casco histórico de la ciudad, en el que rige una normativa muy restrictiva, «que impide un modelo racional de arquitectura», puesto que, entre otros condicionantes, establece la obligación de que los áticos (el espacio bajocubierta), pueda únicamente destinarse a la construcción de trasteros o a la creación de dúplex (vivienda de dos plantas con escalera interior)..
El primero de los cambios establece la eliminación de la obligatoriedad de que el ático, si se quiere destinar a vivienda, tenga que estar vinculado, como dúplex, con escalera interior, al piso inferior. Este cambio permitirá que los áticos puedan convertirse en viviendas independientes, siempre que cuenten con los requisitos que establece la Ley de Urbanismo para la habitabilidad.
Autorizar las terrazas
Otro de los cambios que se plantea servirá para autorizar la construcción de terrazas en las cubiertas, que en la actualidad está prohibido. En el informe inicial elaborado por el Ayuntamiento, se especifica que las terrazas forman parte del modelo de construcción tradicional durante siglos del casco histórico de Palencia, por lo que se recupera este particularidad arquitectónica de la ciudad. Las cubiertas deberán mantener la inclinación que exige la normativa y podrán cortarse para encajonar una terraza, que no estará al borde de la fachada, sino que deberá estar separada por un alero inclinado, con lo que no serán visibles desde la calle..
El tercero de los cambios hace referencia a la altura de los edificios, que podrán elevarse hasta 40 centímetros, con el fin de que puedan cumplirse todas las normativas urbanísticas, puesto que muchos inmuebles tienen alturas que están por debajo de lo que establece la ley. Fundamentalmente afecta a los locales de las plantas bajas, que deben contar con aislamientos especiales, por lo que es necesario darles más altura.
La protección de ocho edificios
La modificación del PGOU incluye además un cambio en la protección de ocho edificios del casco histórico. Se busca rebajar la calificación de siete, así como incluir un palacio que había quedado fuera de protección, a pesar de encontrarse en el centro de la ciudad. Este último caso es el del palacio del Cardenal Mendoza, del siglo XVIII y anejo a la residencia San Bernabé. Queda catalogado con protección estructural, una de las más altas.
En cambio, deja de tener protección estructural para pasar a protección ambiental de tipo I el edificio de los Jofre o Casa Font, en la calle Don Sancho, 4.
Otros seis edificios dejan de tener esta protección ambiental de tipo I, para quedar sujetos a la protección ambiental de tipo II, que autoriza intervenciones de mayor calado, ya que se autoriza la demolición de la fachada, aunque con la obligación de reconstruirla lo más fielmente posible, reutilizando elementos patrimoniales como las rejerías. Los edificios son el número 1 de Barrio y Mier, esquina con la Calle Mayor; el 7 de Barrio y Mier; el 4 de la plaza de León (antiguo hotel Los Jardinillos); los números 68 y 89 de la calle Mayor Antigua; y el edificio que conecta la Calle Mayor y la Plaza Mayor (zapatería Lover).