La mejora del tiempo permite reabrir con normalidad la Autovía de Cantabria

La autovía que une la Meseta con Cantabria, la A-67, ha vuelto a abrirse al tráfico a todo tipo de vehículos en torno a las 14 horas, una vez que las máquinas quitanieve han logrado despejar totalmente la carretera y se ha calmado la ventisca que ha venido azotando durante toda la mañana la zona de confluencia de Palencia con la vecina comunidad cántabra.

Durante prácticamente toda la mañana, la A-67 ha estado abierta al tráfico de forma restringida y únicamente se podía circular formando parte de convoyes, en dirección a Palencia, debido a la fuerte ventisca. El sentido hacia Cantabria no presentaba tantas dificultades.

Los cortes se han mantenido durante toda la mañana también en diversos tramos de la Nacional 627 y la Nacional 611, siempre en las proximidades de Aguilar y el límite con la provincia de Cantabria. Los problemas de deben a la fuerte ventisca.

En cuanto a la red secundaria, es necesario circular con precaución por la presencia de nieve o de placas de hielo en prácticamente todas la carreteras de la zona norte de la provincia. Las cadenas son necesarias en tramos de las vías autonómicas CL-626 y CL-627, además de en muchas de las vías de la zona de La Ojeda y el Boedo.

Están cerradas al tráfico por la acumulación de nieve todas las vías de la zona de los Pantanos, algunas de La Ojeda, la vía que une Herrera con Burgos.

Los problemas en las carreteras han impedido también asistir a clase a 443 alumnos de la provincia de Palencia.