Hernández defiende las diputaciones para salvaguardar el medio rural

«Somos una provincia con 168.000 habitantes, cabríamos en el barrio de Hortaleza de Madrid. Si viviéramos en bloques de edificios de la ciudad, tendríamos las acometidas de agua, luz y la recogida de basuras al lado de la vivienda, pero estamos distribuidos en 446 núcleos de población, de los que el 73% tienen menos de cien habitantes, y hay que llevar los servicios a cada pueblo, porque los vecinos del medio rural tienen los mismos derechos que los que viven en el medio urbano». En estos términos describió ayer el presidente de la Diputación, José María Hernández, la situación de Palencia, como premisa para defender la vigencia de la institución provincial, que considera necesaria para la dotación de infraestructuras, de servicios sociales, de asesoramiento jurídico y económico, para el impulso empresarial y para la cooperación con entidades sin ánimo de lucro, entre otros.

Así lo expuso Hernández durante su intervención en el acto institucional del Día de la Provincia, celebrado en Villarramiel ante la multitud que llenaba la iglesia de San Miguel, que acogió la ceremonia. Más de un centenar de alcaldes, concejales, numerosos representantes institucionales y vecinos de la localidad y de pueblos próximos caminaron por la alfombra roja hasta los bancos.

José María Hernández hizo una pormenorizada descripción de los servicios y ayudas que se prestan desde la Diputación. Así, se refirió a los servicios de recaudación que se gestionan para los municipios, a la atención a las personas mayores y en situación de necesidad, a través de los servicios sociales a los que se destina el 50% del presupuesto, o a la mejora de los más de 3.000 kilómetros de carreteras .

Asumir obras sociales

El presidente de la Diputación destacó la colaboración con las entidades sin ánimo de lucro, «que llegan hasta donde no lo hacen las administraciones». Está aportación, indicó, cubre buena parte de la labor que se prestaba desde las obras sociales de las cajas de ahorro, y lamentó la desaparición de estas prestaciones, «algo muy mal hemos tenido que hacer en las cajas aquí en la Comunidad y fuera de ella para que desaparezcan sus obras sociales», indicó Hernández

El responsable de la institución provincial subrayó, asimismo, el impulso al empleo desde la Diputación, mediante las ayudas a empresas y autónomos del medio rural. Señaló que de las 500 obras anuales que se promueven desde la institución, el 93% se conceden a empresas de la provincia.

El presidente incidió también durante su discurso en la austeridad en la gestión de la institución, hasta el punto de que, en respuesta a la queja expresada por el portavoz de las casas de Palencia por la ausencia de representación institucional en las celebraciones de estas agrupaciones, Hernández afirmó que se habían recortado los viajes fuera de la provincia por cuestión de ahorro. Ello, «unido a la transparencia y agilidad administrativa», ha hecho de esta institución una de las más saneadas de España, y ha conseguido acortar a 17 días el pago a proveedores, frente a los 100 días de la media nacional, subrayó el orador.

José María Hernández anunció que aprovechará la llegada el próximo año del AVE a Palencia para desarrollar nuevos modelos de turismo «que contribuyan a atraer visitantes de la capital de España».

Homenajes y obsequios

La intervención del presidente, que se comprometió a ayudar a los municipios en el reto de la ordenación del territorio, cerró el acto institucional, en el que se rindió homenaje a los exalcaldes de Villarramiel retirados la política, a otros ocho regidores que cumplen 24 años en el cargo y a los representantes de las casas de Palencia en Baracaldo, Bilbao, Burgos, Durango, Madrid Cantabria y Vitoria.

La ceremonia incluyo lcon a entrega de regalos y placas conmemorativas a los homenajeados y al pregonero. También recibieron obsequios el propio presidente de la Diputación y la alcaldesa de la localidad anfitriona, Nuria Simón. La regidora dio la bienvenida a los asistentes y destacó el Día de la Provincia como una ocasión «para celebrar lo que nos une» y para «poner en valor nuestras raíces palentinas».