Editorial: Equiparar pensiones
El Gobierno debería abrirse a mejorar el complemento de pensiones por maternidad, aunque sea una vez que se perciban sus efectos
El Gobierno ha resuelto atajar la brecha de género persistente en las pensiones contributivas recurriendo a un complemento de maternidad que palie los efectos que ... ésta causa en el itinerario laboral de las mujeres y sus cotizaciones a la Seguridad Social. En la actualidad las mujeres jubiladas perciben un 30% menos de media que la pensión media de los hombres. El nuevo complemento, al que podrán acceder también quienes hayan sido padres en determinadas circunstancias –que sean viudos a cargo de hijos con pensión de orfandad, o se hayan visto afectados profesionalmente más que la madre–, estará vigente mientras esa brecha no se reduzca a un 5%.
Se trata de una decisión que atiende a las pensiones más bajas, en tanto que el complemento establecido es una cantidad común para todas las mujeres en situación análoga de maternidad, no sujeta a una proporción respecto a la percepción que hasta ahora pudiera corresponder por sus cotizaciones. Pero la norma precisaría una reflexión añadida para que sea justa tanto con el esfuerzo profesional y de conciliación con la maternidad de muchas mujeres que tienen derecho a una pensión superior. Porque el propósito 'redistributivo' al que se refirió el ministro Escrivá al presentar su iniciativa no tiene porqué desincentivar a aquellas madres, y en su caso padres, que opten por mantener una notable actividad laboral y un alto nivel de cotización.
Entre la fijación de un complemento lineal y el cálculo de un complemento proporcional se abre un trecho que podría mejorar la norma. Reflexión extensible a la situación de aquellas madres –o padres– que decidan tener más hijos que cuatro. Aspecto este último que ha de valorar más la decisión personal y sus implicaciones, que contemplarse como un recurso entre otros frente a la crisis demográfica. El complemento, que adquirió carta de naturaleza en el BOE del miércoles, es indudablemente un avance sustancial respecto al introducido en 2015 por el Gobierno Rajoy.
El hecho de que la Seguridad Social reconocerá a la mujer siempre que no medie solicitud a favor del otro progenitor, o en el caso de que el perjuicio profesional por tener o adoptar uno o varios hijos resulte parejo, concede a la cantidad añadida a la pensión de partida una intención que va más allá de la reordenación del sistema de pensiones en cuanto a su carga igualitarista; pero que, por eso mismo, en determinados casos podría volverse controvertible a falta de mecanismos automáticos de corrección.
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