Los Reyes han ido a Barcelona de incógnito para dar el Cervantes a Joan Margarit, que no lo pudo recibir en Alcalá de Henares en ... abril. El acto no estaba en la agenda real. Se calificó de privado. Pero no como las vacaciones privadas, que al menos hubo fotos. Qué suerte la de Margarit, que no ha tenido que ponerse chaqué ni aguantar el 'Gaudeamos Igitur' (supongo). Pero la liturgia suele gustar.
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Como la última vez que el Rey estuvo en Barcelona se armó el Belén, han debido de preferir el secreto y no despertar a la bestia. Esto es como de Aurora Bautista: «Silencio, no lo despertéis, el rey se ha dormido» (siendo el rey los independentistas ruidosos).
En 1966, Picasso, tras las negociaciones de Dominguín y Edgar Neville con las autoridades franquistas, obtuvo un salvoconducto y viajó a Marbella a la casa de Neville y Conchita Montes que años después compró Sean Connery. A ver si ahora los Reyes van a ser como Picasso en tiempos de Franco.
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