Antonio Canales, en una imagen de archivo. EFE

Antonio Canales deja la vivienda que 'inquiokupaba' en un estado lamentable

Un reportero del equipo de 'Y ahora Sonsoles' ha entrado a la casa para mostrar cómo la ha dejado el artista con latas de cerveza tiradas, el suelo rayado...

El Norte

Jueves, 6 de marzo 2025, 13:59

El periodista Carlos García, del programa 'Y ahora Sonsoles0, que fue objeto de sucesivos 'riegos' por parte de Antonio Canales hace una semana, cuando informaba a las puertas de su casa sobre la salida de la misma del artista, ha podido acceder a la vivienda con su propietaria, Pilar Rodríguez, mostrando en directo cómo ha dejado el inmueble.

Colaboradores del programa al ver las imágenes, entre estos el humorista Miguel Lago y la periodista Pilar Vidal, se han quedado asombrados. Antonio Canales ha dejado la residencia llena suciedad por los suelos y en los muebles, enseres por doquier, suelo con marcas de rallado «por sus bailes y ensayos, los que subía a redes sociales» y numerosos objetos del bailaor que no se sabe si las ha dejado porque no ha podido llevárselas o a modo de 'recordatorio' para Pilar. Sea como fuere, esta sabe que es una experiencia «que jamás voy a olvidar».

Una de las cosas que más ha llamado la atención, mientras las cámaras iban habitación por habitación mostrando el estado de la vivienda, ha sido el baño principal, «el que se supone que utilizaría de normal Antonio Canales». En este numerosas lociones, geles y cremas del artista y, lo más llamativo, en la papelera: estaba llena de latas de cerveza vacías. Al verlo y comenzar a sucederse las especulaciones entre Sonsoles Ónega y sus compañeros a la mesa de debate, Pilar Vidal ha tratado de romper una lanza a favor de Canales, y ha dicho alto y claro: «Cuidado, que igual esas latas son de la empresa de mudanzas que las han dejado ahí».

Esto, según Carlos García y Sonsoles Ónega, es poco probable, pues han llegado a la conclusión de que esta huida del empresario parece haber contado con la colaboración de amigos y familiares, no de una empresa de mudanza. «Y cuidado que igual es mejor preguntarle si va a querer esas cosas, Pilar, no vaya a ser que después las exija y se genere conflicto», han comentado varios a la propietaria del inmueble.