«La vía del diálogo social es hoy un verdadero valor de la Marca España»

«En España debemos hacer de la vía del diálogo social y de la negociación la parte fundamental de la relación laboral, porque desde el exterior, este rasgo se ve como un valor fundamental de la Marca España», aseguró anoche en Valladolid el secretario general del sindicato Unión General de Trabajadores, Cándido Méndez, en la clausura de un acto organizado por la Fundación Fermín Carnero en el que se presentó el libro coral ¿Qué ha pasado con la Economía Española. La gran recesión 2.0 en el que participan catedráticos de Economía de varias universidades españolas junto con psicólogos y comunicadores.

Cándido Méndez resaltó aspectos recogidos en la publicación, que hace hincapié en las políticas erróneas de los últimos años, sobre todo las que se han centrado en el ajuste del déficit y que han sido las promotoras de la segunda recesión española, entre 2011 y finales de 2013 con consecuencias para el empleo más graves que las de la primera caída, la que tuvo lugar entre 2008 y 2010. «La tasa de líderes o de funcionarios que toman decisiones ignorantes está distribuida al azar, pero la concentración que hemos vivido parece responder a otra cosa», ironizó el dirigente sindical al inicio de su intervención. Méndez usó las conclusiones del libro para asegurar que «la lucha contra la crisis es un caso extremo de fracaso en la aplicación de medidas».

Resaltó cómo el Gobierno que preside Mariano Rajoy ha pasado de «abrazar de manera triunfalista la política de recortes impulsada desde la Comisión Europea» a poner ahora en duda esa forma de actuar «que compromete el futuro de España», comentó en el Salón de Grados de la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid.

Economía muy vulnerable

Méndez se mostró complacido de que el acuerdo suscrito entre la patronal, los sindicatos y el Gobierno el 29 de junio pasado «reconoce la necesidad de un golpe de timón» en las políticas restrictivas en una economía, la española, que calificó como «de altísima vulnerabilidad».

De hecho, relató cómo a finales de agosto, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, parecía apostar por la reactivación de la economía y «reconocer que existe un problema serio de deflación y estancamiento económico» ante lo que se necesitaba «un aumento de demanda interna, más salarios y más inversión pública». Ypese a esas declaraciones, el BCE «no se mueve» dijo, lo que implica, a su juicio , que «Alemania manda más de lo que se sabe» y Draghi «se queda en la prédica». Reclamó por eso que el BCE «tome determinaciones» para generar una dinámica que permita que llegue el crédito a la pequeña y mediana empresa y «a partir de ahí avanzar en la senda de la recuperación económica».

Los más afectados

Un motivo de ese fracaso, puntualizó, ha sido la destrucción desde 2007 del 80% de los «cinco millones de puestos de trabajo» creados en la época de expansión económica, lo que significa que España tiene «un modelo económico de una vulnerabilidad muy intensa y grave». Ante ello, considera que «tiene que haber más y mejor industria, más y mejor salarios y más calidad en el empleo». Ymientras, abogó por centrar la protección social en los parados de larga duración, sobre todo los del segmento de edad entre 45 y 64 años, sobre los que se concentran las mayores dificultades. «Cuando un joven pierde su empleo, generalmente es porque se le termina el contrato de trabajo. Sigue en la rueda, cuando alguien de 55 años pierde el empleo es porque le han despedido y posiblemente no vuelva a encontrar trabajo. Este es hoy el segmento con mayor riesgo de pobreza y exclusión social» comentó. «Hay que dar una solución y una salida urgente a medio millón de familias en situación extrema, porque el paro entre los desempleados de 45 a 64 años de edad se ha incrementado en el 160%», insistió el dirigente sindical y para este fin, calculó el coste en 2.500 millones de euros, fruto de los acuerdos alcanzados en julio pasado entre sindicatos y la patronal con el Ejecutivo.

Consecuencias muy dañinas

El secretario regional de UGT, Agustín Prieto, abrió el acto de presentación de la publicación con una pregunta:«¿Ha terminado la crisis?» para advertir de inmediato de los peligros de lanzar «las campanas al vuelo» por algunos indicadores que han entrado en valores positivos como ya ocurriera en el año 2010, cuando los brotes verdes del ciclo económico terminaron en una segunda recesión más profunda y catastrófica que la anterior. «¿Habrá una tercera recesión?, pues no lo sé», se respondió y precisó algunos hechos preocupantes en este sentido, como el estancamiento cuando no la caída del consumo interno, la tendencia deflacionista y el escaso incremento del empleo.

«El modelo productivo al que aspiramos desde UGT es aquel que haga que los salarios y la productividad crezcan de forma conjunta, con productos de alto valor añadido y no basada en ganar competitividad mediante la bajada de los costes salariales, si no en la calidad y la innovación, concluyó prieto.