«Nadie del PP me dice lo que tengo que hacer. Yo no soy un político profesional»
El portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Barcelona asegura tener «un pacto de caballeros» con Pablo Casado
E. g. C.
Viernes, 5 de julio 2019, 19:59
José Bou es el portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, y por eso lo lógico sería pensar que está sometido a las ... directrices de esa formación política. Pues resulta que no. O, al menos, no con la misma rigidez que otros que ocupan un cargo como el suyo. «Yo hago lo que considero conveniente. Nadie del PP me dice lo que tengo que hacer», sentenció ayer.
Lo justificó, eso sí. En primer lugar, reivindicándose como el empresario que es –«yo no soy un político profesional ni lo voy a ser nunca»– y, acto seguido, con una interesante revelación. «Pablo Casado y yo tenemos un pacto de caballeros», desveló Bou, que dejó entrever que el presidente nacional del PP le ha dado carta blanca para que haga y deshaga a su antojo. Quizá porque cuando aceptó presentarse como cabeza de lista, las encuestas situaban al partido fuera del Consistorio de la capital catalana.
«Entré en el PP porque estaban 0-0. Si hubieran tenido 2-3, no entro», explicó. Se decidió cuando vio que su comunidad autónoma «se podía poner en punta de lanza del nacionalismo». Ahora bien, con la misma claridad que un momento antes, reconoció que la marca PP le había penalizado. «Con un mes más, habría sacado 3-4 (concejales). Y llevaba una mochila pesada que era el PP. Sin el PP, hubiera sacado más. Pero me gustan las cosas difíciles».
La candidatura encabezada por el expresidente de los empresarios catalanes logró dos ediles de los 41 que estaban en juego en las elecciones municipales del 26 de mayo, un resultado modesto que sin embargo supuso «salvar los muebles».
Temperamento y sangre fría
El peor momento de José Bou desde que se convirtió en 'regidor' –concejal– del Ayuntamiento de Barcelona fue el pasado 15 de junio, con motivo de la votación para elegir nuevo alcalde. El empresario, que se define como «un hombre temperamental pero con bastante sangre fría», pasó nervios ese día.
Ante la disyuntiva de que entrara Ernest Maragall (ERC) o continuara Ada Colau (En Comú), una vez más lo vio claro. «Prefiero el susto a la muerte, porque del susto te recuperas, pero de la fatalidad no», ironizó Bou. Es decir, antes Colau que Maragall. Eso sí, tenía que salir sin los votos del PP.
Por eso el portavoz popular dedicó la tarde del día anterior a hacer llamadas –más de una docena– a la propia alcaldesa, Jaume Collboni (PSC) y Manuel Valls (Barcelona pel Canvi), hasta asegurarse de que la líder de los comunes tenía apoyos suficientes para repetir. «Fui un poco político ahí, lo reconozco».
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