Castilla y León registra las mismas huelgas que hace 17 años

El número de huelguistas y huelgas en la región se sitúa hoy en día en los mismos niveles que en el año 2000. Así lo determina un estudio del grupo Adecco, realizado mediante los datos facilitados por la Encuesta de Población Activa (EPA), que publicó el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El informe determina que el salario medio de los castellanos y leoneses sufrió una pérdida interanual del 0,8%, situándose en 1.461 euros mensuales, en comparación a 2016. Extremadura y Murcia son las dos comunidades donde más descendió la remuneración media, al contrario de Cantabria, Asturias o Castilla-La Mancha, que destacaron por ser las únicas tres regiones donde el salario medio experimentó un incremento interanual superior al 1%.

El análisis publicado por la gestora de recursos humanos Adecco, posiciona a Castilla y León como la décima en pérdida de poder de adquisitivo, justo por debajo de la media nacional, con el -1%. Esto contrasta con el incremento del 3,1% que experimentó la región en junio de 2016. Otras diez comunidades autónomas exhibían hace un año un aumento en el poder de compra, pero ahora presentan una caída del mismo.

El salario medio del segundo trimestre de 2017, en comparación con el mismo de 2015, descendió el 0,7%, es decir, 142 euros menos. Solamente cuatro autonomías muestran un incremento si se analiza este parámetro, siendo la más elevada Cantabria, con 881 euros más que hace dos años.

Centrado en la prestación por desempleo, el informe determina que en el conjunto de España, la proporción de parados que recibieron esta ayuda, aumentaron de forma interanual en cada uno de los últimos seis trimestres, cosa que no sucedía desde 2008. Actualmente se sitúa en el 52,1%, que es la mayor proporción desde septiembre de 2013.

Trece autonomías acompañan esta tendencia general y aumentaron el grado de cobertura de sus colectivos de parados. Castilla y León no solo es una de ellas, sino que incrementó en mayor medida que la media, en concreto, el 4,5% más. La región tiene actualmente el 53,1% de sus parados cubiertos por una prestación de desempleo, la mayor proporción desde 2014. Además, el 38,9% de los parados castellanos y leoneses son ahora de larga duración. Esto supone que 61.700 personas buscan empleo sin resultado desde hace dos años o más.

Por último, según el informe, los accidentes laborales se incrementaron el 2,7% en un año. Se registraron 59,6 por cada 10.000. A pesar de ser la tercera autonomía con menor número de accidentes, no registraba estos resultados desde marzo de 2012.

Otro de los aspectos que aborda el estudio es la conciliación entre vida personal y laboral. En el caso de los ocupados que cursan estudios, estos equivalen en España al 10,7%, dos décimas más que hace un año. De este modo, se interrumpe la tendencia negativa en esta variable, que había comenzado a descender a mediados de 2014. Este grupo aumentó su participación en el empleo total en 14 autonomías, entre ellas Castilla y León. No obstante, el incremento es de centésimas, por lo que en la práctica es repite el registro de hace un año, del 9,6%. Por ello, 102.000 personas trabajan y estudian al mismo tiempo en la región. El País Vasco registró los índices más elevados, con el 14,2% del total.

Desde 2013 la recuperación iniciada por el mercado de trabajo permitió una reducción general de la conflictividad laboral. Aunque con muchas diferencias entre autonomías, esa tendencia se quebró en el período analizado. Sin embargo, Castilla y León mostró una nueva caída en este aspecto desde 2014, donde alcanzó su máximo de 17,2 huelgas por cada 100.000 empresas. Actualmente, según el estudio, se registraron 6,1 huelgas en el trimestre que nos ocupa, tras una caída interanual del 45,6%. Es la menor proporción de huelgas para esta autonomía en al menos 17 años y a tercera más baja entre todas las demás comunidades españolas. El País Vasco, en cambio, registró 78,7 huelgas por cada 100.000 empresas. Respecto a los participantes en huelgas, Castilla y León descendió el 80,2%, hasta situarse en 2,3 participantes en huelgas por cada 10.000 ocupados. Por último, el estudio determina que la región es la décima en oportunidades y satisfacción potencial en el empleo, con 5,3 puntos.