El expositor da cuenta de la cantidad y variedad de productos amparados por Tierra de Sabor. El Norte

El trabajo interno: controles que garantizan la calidad del producto

Desde que comenzara la marca se han tramitado más de 3.000 solicitudes

Silvia G. Rojo

Salamanca

Viernes, 8 de octubre 2021, 18:58

.Desde que naciera Tierra de Sabor, hace ya más de una década, el propósito de este proyecto del sector agroalimentario de Castilla y León ha sido la apuesta por la calidad. Una suma de esfuerzos que permite crear una gran marca de dimensión nacional, ocupar un espacio único de productos que tienen tradición, historia, y nombre y apellidos de los productores de las materias primas con los que están elaborados. Una respuesta conjunta a profesionales y consumidores que exigen conocer al detalle aquello que adquieren y consumen.

Publicidad

De este modo, hay dos pilares fundamentales que sustentan la marca: Origen y calidad superior, y para velar por el cumplimiento de los mismos, existe un grupo de profesionales adscritos al Área de Calidad Alimentaria del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl).

En primer lugar, es necesario diferenciar dos aspectos relacionados con la marca, pero estrechamente vinculados, como son la puesta en valor y promoción de los productos que, en cierta medida, aporta un valor añadido; y, por otra parte, está la gestión, lo que hace que los productos tengan una fiabilidad y calidad que realmente den el valor de marca.

Este Área de Calidad Alimentaria de Itacyl es el encargado de tramitar las autorizaciones para la inscripción en el registro de operadores. El primer paso por parte de la empresa interesada, da igual el tamaño, es solicitar la inclusión y acreditar el cumplimiento de los requisitos.

Vinculación con la tierra

Los productos que pretendan tener la autorización de uso de Tierra de Sabor deben atesorar características de calidad que les diferencien del resto de los de su categoría; además, deben de tener una vinculación con el territorio de Castilla y León y estar en posesión de una certificación de un tercero independiente al margen del control de Itacyl, que avale que atesoran esa calidad diferenciada.

Publicidad

Una vez que el interesado acredita esas características para cada producto que quiere incluir en la marca, se genera la autorización.

La pregunta inmediata que puede surgir es ¿cómo se acredita la calidad diferenciada de un producto? En el caso de aquellos que están amparados por alguna figura como puede ser una marca de garantía, una denominación de origen o una indicación geográfica protegida «ya tienen una calidad demostrada», informan desde Itacyl, porque «Tierra de Sabor es una marca paraguas que aglutina productos de las distintas figuras de calidad que tenemos en Castilla y León».

Por ejemplo, si se trata de queso y, efectivamente, en la región existe una figura de calidad que es Queso Castellano, el acceso a Tierra de Sabor se debe solicitar a través de la misma.

Excepciones

Existen excepciones para todos esos productos que por su naturaleza o características no pueden estar amparados por una de esas figuras. En ese caso, deben redactar un documento técnico o pliego de condiciones en el que se establecen las cualidades de su producto que les hacen diferentes del resto y la vinculación al territorio. Una vez presentado ese documento, se aprueba y la empresa tiene que contratar a un organismo de control, un tercero independiente, que certifique que se cumple.

Publicidad

En el caso de la vinculación con el territorio de los productos está clara ya que esas figuras de calidad prohiben elaborar con materias primas que no sean de la zona. Por la tanto, la autorización de un producto que ya está amparado por una denominación de origen, marca de calidad o IGP es muy sencilla, la empresa presenta la solicitud y el certificado de que están amparados y se les autoriza al uso de la marca en cuestión.

Desde que comenzara a funcionar Tierra de Sabor se han tramitado más de 3.000 solicitudes. Tal y como destacan desde el Área de Calidad Alimentaria de Itacyl, «anualmente tramitamos entre 250 y 300 solicitudes de este tipo». Una aclaración que conviene hacer es que aunque las cifras de autorizados son lineales, es decir, se mantienen unas 900 empresas y 6.000 productos, no siempre son las mismas como consecuencia de las actuaciones de control y anualmente hay bajas y altas.

Publicidad

Desde que empezó este proyecto se han dado de baja o se han retirado 300 empresas, pero se han incorporado otras tantas.

La función de este Área de Calidad es doble pues, por una lado, está esa parte previa de autorización de la marca y, una vez concedida, se llevan a cabo una serie de controles posteriores. Todos los años se hace un plan de control anual a los operadores.

En función de los recursos y los riesgos se hace un análisis de incumplimientos y así, el plan incluye unos 450 controles anualmente, más otras 300 actuaciones de vigilancia en puntos de venta.

«Vamos a las instalaciones de los operadores y comprobamos que continúa con las condiciones que motivaron la autorización», añaden estas fuentes.

Publicidad

De manera más detallada, se comprueba si sigue vigente la certificación a la figura de calidad a la que pertenece, si mantiene la propiedad de la marca, si usa Tierra de Sabor para aquellos productos que tiene autorizados o si se utiliza de una manera que pueda causar confusión al consumidor, entre otros factores.

Las incidencias pueden ser variadas, desde que se tenga caducada la marca comercial al certificado del tercero independiente también sin validez.

Esos fallos pueden ser administrativos y entre los más comunes está que se use el logotipo de una forma incorrecta.

Noticia Patrocinada

Hay ocasiones en las que las propias empresas se dan de baja como consecuencia del nivel de inspección, pues no siempre se está dispuesto a recibir las visitas.

«Muy estrictos»

Desde Itacyl dejan claro que «el que quiera entrar tiene que someterse a las tareas de control, somos muy estrictos».

Desde que comenzara a funcionar la marca, se han dado de baja a 300 empresas lo que ha supuesto la retirada de autorización a más de 4.000 productos, aunque sigan autorizados 6.000.

En diez años, los controles rondan los 4.500 y se han emitido 1.300 oficios o comunicaciones de cuestiones que se debían corregir y que, en su mayor parte, no son incumplimientos graves, «pero para nosotros pueden poner en peligro el prestigio de la marca y pueden conllevar la retirada de la autorización».

Publicidad

Por último, desde este Área de Calidad Alimentaria insisten en la «profesionalidad» de los productores de Castilla y León. «Nuestras tareas de control tienen como resultado que se produzcan bajas porque hay quien incumple, pero eso no quiere decir que sean malos productos sino que no se respetan cosas de la marca y lo asumen y se retiran. No es que pretendan abusar, casi todo son cuestiones que se producen por el desconocimiento, o porque no pueden cumplir y lo asumen, no va a más.Nunca hemos tenido ningún recurso porque comprenden que la política de la marca tiene que ser esa, la de la calidad y el rigor para que todos los productos tengan las garantías».

Desde este servicio también han ido comprobando con el paso de los años, en primera persona, cómo cada vez la variedad de productos es mayor. Los buques insignia siguen siendo los embutidos, los jamones, los quesos o los vinos, pero hay mucha riqueza y variedad, como mieles, mermeladas, pastelería o confitería artesana en general, que aporta mucho a la marca. «Es un reflejo de la diversidad y riqueza de los productos que tenemos en Castilla y León», valoran desde Itacyl.

Publicidad

El jamón es uno de lso buques insignia de la marca. El Norte

300 actuaciones anuales de vigilancia en puntos de venta

El control de la calidad de los productos amparados por Tierra de Sabor no solo se realiza en el origen sino también en los puntos de venta. Así, cada año se acometen unas 300 actuaciones de vigilancia con las que se pretende comprobar que todo aquello que se ha detectado en el operador es cierto. De este modo, se descarta que pueda existir mercancía condicionada por la visita y porque, finalmente, el punto de venta es donde está el producto con la marca. A veces, es en ese lugar donde se observa que algo no cuadra y, en virtud de esos resultados, se actúa con el operador. Se puede afirmar que este tipo de control es, en ocasiones, el punto de entrada.

Tampoco se puede obviar que Castilla y León es el territorio más grande de España y que Tierra de Sabor abarca todo el ámbito regional lo que supone un esfuerzo grandísimo por parte de los técnicos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3€ primer mes

Publicidad