Tierra de Sabor

Desde ginebras a cervezas artesanas, todo es Tierra de Sabor

La calidad también se traslada al mundo de las bebidas, la cara menos conocida de la marca del corazón amarillo

Silvia G. Rojo

Ciudad Rodrigo

Viernes, 1 de octubre 2021, 17:19

Existen dos pilares fundamentales que, desde el principio, sustentan la marca Tierra de Sabor: Origen y calidad superior. El primero es esencial en nuestros días, la denominada trazabilidad permite al consumidor conocer de dónde proceden los alimentos que consume. Respecto al segundo, es la gran apuesta del sector, calidad tanto de las materias primas como del proceso de elaboración.

Publicidad

Esas dos premisas que se asocian de manera sistemática a todos esos alimentos que llevan en sus etiquetas el corazón amarillo y que de manera más mayoritaria se contabilizan en carnes, embutidos o quesos, están igualmente en productos más minoritarios, en la cara menos conocida, que abarca desde ginebras a cervezas, pasando por yogures de gin tonic.

En la localidad zamorana de Vega de Tera, Hermanos de la Fuente se dedica a la elaboración de hasta 18 tipos de licores diferentes. «Somos una destilería de licores de toda la vida», matiza Daniel de la Fuente, que ya representa a la cuarta generación en el negocio.

La empresa la fundó su bisabuelo, las técnicas las siguió perfeccionando su abuelo; después su padre y su tío y, ahora, el negocio está prácticamente en manos de él y de su hermana. «Recepcionamos el orujo de las bodegas y a continuación lo ensilamos y destilamos a la vez; es todo un proceso artesano de elaboración propia, no lleva nada más», apunta, y en el que utilizan las variedades verdejo, prieto picudo y malvasía para lograr «orujos frescos, sin fermentación».

Empresas familiares

Los licores de hierbas, pacharán o crema de orujo de la firma cuentan con el sello de Tierra de Sabor y desde hace unos cinco años se ha unido la ginebra Gin Vega. «Al principio costó mucho, no dejamos de ser una empresa familiar, y aunque sigue costando, es reconocida en Zamora, se envía a toda España de un día para otro y estamos en puntos estratégicos porque a la gente le ha gustado», añade. Su objetivo no es alcanzar grandes producciones, «elaboramos 1.500 litros de la seca y otro tanto de la afrutada cada año», y tal y como reconoce, estar en Tierra de Sabor «nos ha servido para demostrar que lo hacemos bien y tenemos un proceso artesano».

Publicidad

En la provincia de León la ginebra artesana lleva la firma de Búnker, el proyecto de Enrique Lozano, quien hace cinco años decidió abandonar Guadalajara para montar esta destilería. Asegura que la diferencia de su producto está en que «no utilizamos químicos, ni azúcares ni colorantes», lo que unido a los procesos de maduración óptimos les ha hecho merecedores de ocho premios internacionales. Este mismo año, han recogido el reconocimiento a la mejor ginebra de España. «No nos podemos quejar», reconoce. Solo en la provincia de León están posicionados en unos 800 locales, y la distribución la hacen por toda España.

Raquel Arranz prepara sus yogures de sabores.

Raquel Arranz: «A veces se encasilla a los productos artesanos y también pueden ser originales»

El próximo 1 de noviembre, los propietarios de Quesería Artesanal Sacramenia cumplirán 21 años de su primera elaboración. «Fue algo caótico, los nervios se apoderan de ti porque pensabas que sabías muchas cosas, pero cuando llega la hora de la verdad no es lo mismo lo que has estudiado que estar frente a la cuba con la leche», recuerda Raquel Arranz. A pesar de todo, equilibra el momento entre lo «caótico e ilusionante» y el inicio de un proyecto que ya se extiende durante algo más de dos décadas.

Empezaron haciendo queso, «seguimos haciendo queso con leche cruda de oveja: semicurado, curado y añejo», dando así un giro profesional al queso que siempre hizo la abuela para el consumo doméstico, detalla. Hace unos 15 años llegaron los postres «y nos metimos con los más básicos: cuajada y yogur natural de leche de oveja de los que ahora hay muchos, pero antes no era común». La inquietud por hacer cosas diferentes no se quedó ahí y, en la actualidad, hacen 17 variedades de yogur: natural, mandarina, limón, mango, kiwi con naranja, aloe, melocotón, piña y coco, lima limón, fresa naranja, hierbabuena, caramelo de violeta, gin tonic, mojito, crema de whisky, chocolate blanco y ponche segoviano.

«A veces se encasilla a los productos artesanos y también pueden ser originales o divertidos», manifiesta la quesera, quien reconoce que para disponer de todos esos sabores «hemos hecho muchas pruebas con diferentes variedades, el caramelo de violeta, por ejemplo, la encantaba a mi madre y por eso quise hacerlo».

Diferentes

En cualquier caso, «todos están elaborados con productos naturales», con la leche de oveja con la que se produce el yogur natural y, en la parte de abajo del tarro, es donde aparece la mezcla de la variedad en ese deseo por «hacer cosas diferentes, que no se encuentran en el mercado, de ahí surge todo el tema de las variedades».

Sonríe cuando indica que no se les ha resistido ningún sabor aunque es verdad que «a veces, la acidez del yogur natural no termina de combinar con el sabor del preparado que añades, por ejemplo, el amargor del chocolate normal en boca no termina de gustar. No es que se nos haya resistido, pero no nos han gustado las pruebas».

Alcanzar el sabor deseado requiere «probar mucho», pero tal y como señala la quesera, «para eso también tienes amigos, gente que te diga la verdad de lo que les parece, no que todo está muy bueno; así que sí, tienes que hacer muchas pruebas y luego ver la cantidad del preparado; que el yogur no se coma al preparado y el preparado no se coma la yogur, que haya un equilibrio».

Sobre las preferencias de los clientes Raquel, tiene comprobado que «están más vinculadas a la estacionalidad que a otra cosa, en verano a la gente parece que nos gustan más los sabores cítricos, más refrescantes, y en invierno, sabores como la mandarina o el mango».

La distribución se hace a través de diferentes tiendas o su página web y «afortunadamente, hoy en día hay agencias que trabajan en frío y repartimos a nivel nacional, a cualquier punto de la Península».

«El que prueba, repite»

Define a los clientes como «muy fieles», pues entiende que es un perfil que valora los productos artesanos y naturales, «están fidelizados y el que prueba, repite».

La elaboración la va haciendo en su quesería de Sacramenia, en Segovia, en función de la demanda, «ya sabes que si viene un puente o el verano vas a necesitar más, pero esto no es como el queso que lo haces y tiene que pasar un tiempo así que no te sabría decir cantidad».

La artesana muestra mucha satisfacción con todos los productos, «pero sí que ha aumentado más, en proporción, la venta del yogur; no por nada especial, sino porque es algo diferente. En España hay maravillosos quesos, pero yogures artesanos con leche de oveja no hay tantos, sí hay más que hace unos años, pero no hay tanta competencia como con el queso», señala.

Estos productos están integrados en la marca de Tierra de Sabor. «Al final, ir bajo el paraguas de esta marca de calidad a la gente ya le ofreces una garantía de que puede confiar en ti, hay controles y un proceso que hay que cumplir».

Por último, Raquel no deja de poner en valor lo que suponen proyectos como el suyo para el medio rural. «Somos los que luchamos para que esto siga adelante, por eso, cuando compran un yogur artesano, solo están comprando algo natural sino que están ayudando a mantener el medio rural vivo y las industrias agroalimentarias son una buena salida», defiende.

Cervezas

El capítulo cervecero artesano está perfectamente representado por las provincias de Segovia y Ávila. En La Granja de San Ildefonso se elabora artesanalmente la cerveza La Granja de Goose, una cerveza tipo ale que se distingue porque se obtiene mediante fermentación templada. Tal y como explica Ignacio Vacchiano, responsable de la firma, comercializan tres líneas de productos con un catálogo principal de cinco cervezas de producción continua; otras de temporada y por último, lotes únicos, «con los que vamos explorando distintos estilos de cerveza». «Con estas variedades abarcamos muy bien el abanico de los posibles gustos del consumidor», manifiesta Ignacio. Las aguas de la zona son fundamentales para la elaboración y, en cuanto al resto de materias primas, reconoce que cada vez se hacen cosas más específicas con el lúpulo en León y «tratamos de aprovechar esas materias».

Publicidad

Planta de embotellado de Cerveza Gredos.

El agua también es el elemento fundamental de la Cerveza Gredos, que comercializan de manera continuada la rubia y la doble malta. Las materias primas también son de Castilla y León y, tal y como indican desde la firma, «hay mucha gente que mira la garantía de tener el sello de Tierra de Sabor», marchamo en el que están incluidos. Igualmente, se valora, «a parte del sabor, que sean productos de kilómetro cero».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3€ primer mes

Publicidad