Borrar
ELNORTE
+VINOS

Ismael de los Mozos: «Elaboro vino casero para entretenerme y desconectar»

El director de GSK Aranda ha comprado un pequeño viñedo y un espacio en una bodega subterránea para realizar la crianza

Miércoles, 14 de diciembre 2022, 22:05

Comenta

Licenciado en Farmacia, dirige la planta de la multinacional GSK en Aranda de Duero. La factoría, con 600 trabajadores, produce casi la mitad del Ventolín que se fabrica en el mundo. Más allá de sus altas responsabilidades profesionales, a Ismael de los Mozos le gusta dedicar tiempo a una de sus pasiones: el mundo del vino. Desde hace años elabora su propio vino de cubillo, incluso ha comprado un pequeño viñedo para completar todo el proceso.

–¿Qué lleva a un licenciado en Farmacia, al frente de una planta de una multinacional, a sentir esa pasión por el vino?

–La verdad es que me ha surgido en los últimos años, a raíz de relacionarme con personas de la Ribera que estaban inmersas en ese mundo. De niño también recuerdo oír hablar a mi abuelo de un majuelo que tenía. Hacía vino para consumo casero, un vino que no era blanco ni tinto, y al que llamaban «ojo gallo».

–Hace su propio vino de cubillo, seguro que han servido sus conocimientos profesionales...

–Intento hacer un vino lo más ecológico posible, supongo que los conocimientos adquiridos durante mis estudios ayudan de alguna manera a la hora de su elaboración: el seguimiento de las fermentaciones, temperatura, acidez, etc…

–¿Qué le hizo dar el paso a la elaboración?

–Unos amigos hacían su vino y compartieron conmigo sus conocimientos y entusiasmo. Llegó la oportunidad de adquirir un pequeño viñedo y comencé utilizando las instalaciones de un amigo para la elaboración del vino. Hace cinco años, di el paso de hacerlo yo solo en una instalación casera propia.

–En un lugar con historia...

–Me lancé a comprar un espacio en una bodega tradicional de Aranda, donde poder efectuar la crianza en barrica y su posterior almacenamiento. Me gusta experimentar y hace cuatro años planté diversas variedades de uvas no muy comunes por esta zona: gewürztraminer y riesling para vino blanco, y otras como sirah y merlot. Este año he elaborado mi primer vino blanco. Veremos el resultado.

–Confiese, ya ha llegado al punto de servir este vino a sus amigos... ¿con qué valoración?

–Al principio, sorpresa; no sabían que elaboraba mi vino. Como buenos amigos, a la mayoría les parecía que estaba bueno pero, poco a poco, fui trabajando en mejorarlo. Actualmente, aunque he ganado dos premios de vino casero este año, creo que todavía me queda mucho por aprender.

–¿Se ve haciéndolo profesionalmente?

–La verdad es que no. Lo considero un entretenimiento y una excusa para tener retos, desconectar, conocer gente interesante... En ningún caso para pasar al mundo profesional. El vino es un producto muy vivo y complejo en el que influyen numerosos factores que son, algunas veces, difíciles de controlar para un aficionado

–En sus preferencias… ¿tinto, rosado, blanco, espumoso?

–Cada vino tiene su momento. Si tuviera que quedarme con uno, elegiría un rosado, fresquito, pero reconozco que cada vino tiene su propio maridaje. El blanco en verano es insustituible y un buen tinto en invierno da pie a interesantes conversaciones en torno a una mesa de amigos.

–¿Qué cura un trago de vino que no consigue la mejor de las medicinas?

–Culturalmente el vino siempre ha formado parte de nuestras celebraciones y de nuestra vida social. Una copa de vino en buena compañía siempre resulta muy agradable y puede dar lugar a grandes conversaciones y buenos momentos.

–Su maridaje gastronómico...

–Un vino de la Ribera del Duero con un estupendo lechazo asado o unas chuletillas.

–¿En qué momento no puede faltar una botella de vino?

–Sin duda, con familiares y amigos disfrutando de una buena comida.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Ismael de los Mozos: «Elaboro vino casero para entretenerme y desconectar»

Ismael de los Mozos: «Elaboro vino casero para entretenerme y desconectar»