El éxito de lo esencial

De Miguel, quien fue profesor de la Universidad de Salamanca, aporta interpretaciones al texto, diálogos con otros textos y otras reflexiones sobre su contexto que dan cuenta de su condición de investigador experto. A De Miguel se le suma Javier San José Lera, también de la Universidad de Salamanca, que se encarga de la selección y dirección musical. Las expectativas eran altas porque el espectáculo es uno de los más buscados por el público de Olmedo. 'Fuenteovejuna en sus versos esenciales' no decepcionó: a treinta minutos del comienzo, la fila se extendía fuera del Centro de Artes Escénicas San Pedro, a pesar de los casi cuarenta grados que azotaban a la Villa del Caballero. En el interior se preparaban, junto con De Miguel y Lera, los actores Arturo Querejeta, David Boceta, Carlos Pinedo, Sergio Adillo y Paula Iwasaki y también la violinista Carlota Esteban y la pianista Sandra Bertolini, que ejecutarían en vivo distintos fragmentos de la Novena sinfonía de Beethoven.

El público, conmovido, no quitó los ojos del escenario en los sesenta minutos que duró la puesta en escena. Los espectadores, empáticos, se transformaron en el pueblo de Fuenteovejuna y se sintieron responsables de la tragedia cuando las luces los apuntaban directamente, durante el fantástico monólogo de Laurencia. El público, fervoroso, iluminado otra vez por los reflectores, repitió a gritos: «¡Fuenteovejuna lo hizo!». Las magistrales interpretaciones de Querejeta, Boceta, Pinedo, Adillo e Iwasaki generaron aplausos calurosos y desmedidos. Tres veces volvieron los actores, las intérpretes musicales, de Miguel y Lera para recibirlos. Olmedo espera, con ansias, la próxima edición de estos 'Versos esenciales' que no dejan nunca indiferente al espectador.