Sorogoyen estrena en Seminci la serie 'Los años nuevos'

Protagonizada por Francesco Carril e Iría del Río, la serie transcurre a lo largo de diez años y diez episodios en la vida de una pareja, un retrato de los miedos, inquietudes, reflexiones y sueños de una generación que se exhibirán en el certamen de Valladolid en dos bloques, el 18 y 19 de octubre.

Los festivales cada vez proyectan más series. Y es que el séptimo arte y el formato del largometraje ya no son competencia exclusiva de un certamen de cine. Al contrario, con el tiempo estas convocatorias se han ido flexibilizando y dando pie a nuevos y más estimulantes formatos. Se ha acogido, claro, a los cortometrajes, a los mediometrajes, a los documentales cinematográficos e incluso a otros con factura más reportajeada. Ha sido cuestión de tiempo, dadas tanto la creciente calidad de ciertos productos seriados como su importancia en tanto a convocatorias de público como en hábitos de consumo, que estas producciones tuvieran cabida también en estos espacios de exhibición.

La 69ª edición del Festival Internacional de Cine de Valladolid no es ajena a esta nueva moda, lejos de ser únicamente fruto de un momento cultural y artístico donde el porcentaje de series que arriesgan con historias originales y humanas (e incluso cierta factura técnica y artística antes reservada a los largometrajes) que el grueso de la cartelera popular, más cómoda en cromas, franquicias y productos de éxito que aseguren la rentabilidad de la inversión a corto plazo en el sistema de exhibición actual.

Así, nuestro festival ya ha acogido, a lo largo de sus últimos certámenes, series como 'Memento Mori', basada en el libro homónimo del vallisoletano César Pérez Gellida; 'The Chosen', narración episódica sobre la vida de Jesucristo desde el punto de vista de sus discípulos; o 'Vida perfecta', comedia también con espíritu de retrato generacional dirigida y protagonizada por Leticia Dolera.

Pero también en Seminci se han podido ver, hace años, títulos que hoy son clásicos de la pequeña pantalla, e incluso considerados obras mayores por reputados cineastas. Es el caso de 'Berlin Alexanderplatz' de Rainer Werner Fassbinder, 'El reino' de Lars von Trier' o el piloto de 'Twin Peaks', toda una sensación a comienzos de la década de los noventa.

Hoy es casi anomalía el festival que no proyecta una u otra serie. Desde San Sebastián se ha podido ver 'Patria', la adaptación que en HBO se realizó de la novela superventas de Fernando Aramburu, pero tampoco olvidaron en Donostia, a la hora de hacer una retrospectiva sobre Krzysztof Kieślowski, su monumental 'Decálogo'. En el Festival de Málaga, por su parte, tuvo lugar el estreno de 'Veneno', una aclamada producción de Los Javis en torno a la vida de Cristina Ortiz y a un fenómeno televisivo que también retrataba un momento cultural, filosófico y social de la historia reciente de nuestro país.

En Europa, por citar algunos ejemplos, Paolo Sorrentino llevó al Festival de Venecia sus series 'The Young Pope' y 'The New Pope', protagonizadas por Jude Law. Incluso ciertas producciones americanas han tenido su cabida en festivales de cine. Es el caso de 'Better Call Saul', spin-off de la laureada 'Breaking Bad', que exhibió el arranque de su temporada final en el certamen de Tribeca. O, de nuevo, el 'reboot' de Twin Peaks en 2017, dirigido, como su serie seminial, por David Lynch, que supuso una unísona y clamorosa ovación en Cannes. Mismo festival que, por cierto, masacró sin piedad la última aportación lyncheana al universo del agente Cooper y Laura Palmer; 'Twin Peaks: Fuego camina conmigo', en 1992.