Valladolid
Marc Anthony seduce con bailes sugerentes y salsa tórrida en su concierto en SimancasEl artista hilvana varios de sus éxitos en un concierto con más del 96% de su aforo completo
Mirando a las polémicas de conciertos anteriores de Marc Anthony en España, cualquier retraso mínimo parecía señal de que el desastre podía repetirse en las ... instalaciones deportivas Los Pinos de Simancas. Los primeros pronósticos pintaban mal, pero a veinte minutos de la hora señalada, como un fogonazo, el público enloqueció y la banda de Anthony comenzó a hilvanar un popurrí de varios de sus éxitos para caldear a la concurrencia, incluyendo 'Tu vida en la mía', 'Ahora quien', 'La Gozadera' o 'Aguanile'.
Anthony al fin salió, con la lección aparentemente aprendida, y el tema 'Pa'llá voy' ya arrancó la aprobación incondicional de sus acólitos, que incrementaban varios niveles sus gritos y algarabías con cada uno de los contoneos sugerentes del cantante. En su segundo tema, la celebérrima 'Valió la pena', ya se metió en el bolsillo a las cerca de 9.150 personas, según datos de la organización, que habian adquirido su entrada para este espectáculo. Entre ellas, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, o el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero. Habida cuenta de que el aforo del recinto se fija en 9.500 localidades, esto suponía más del 96% del aforo completo.
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A sus 56 años, el artista puertorriqueño demostró su excelente forma tanto en lo melódico como en lo físico, a través de diferentes temas como 'Y hubo alguien', que a pesar de contar con más de veinticinco años desde su gestación, exudaba juventud y vitalidad. A cierre de esta edición, arrancaban los compases de otra de las canciones más representativas del músico; 'Hasta ayer', de ritmos más lentos pero de pasiones igualmente intensas y seductoras.
Cuando parecía que los espectadores no podían ser más embaucados, Anthony solicitó con ojos felinos que le acompañaran en su «canción favorita», 'Flor pálida'. No hizo falta mucho más; quien se sabía la letra bien acompañaba o bien se apresuraba a los versos inspirados del cantante; quien no, trataba de emular sus movimientos de baile con piernas, caderas o cuello, según lo que demandase el ritmo de la melodía.
Perales del Caribe
A estas alturas de la noche, y con agilidad razonable entre tema y tema, las polémicas pasadas de Anthony habían resultado olvidadas con gusto. Tras temas como 'Volando entre tus brazos' o 'Almohada', el músico, astuto como un zorro, también lanzó un guiño al país donde se encontraba con su particular versión caribeña de '¿Y como es él?' de José Luis Perales, una de las más coreadas de la noche.
Los temas animados volvieron a hacer su aparición con '¿Qué precio tiene el cielo?', que dio paso a 'Te conozco bien' y la muy bien recibida 'Mala'. Cercana la madrugada del sábado, Anthony dio el falso cierre 'in extremis' con la muy pertinente 'Parecen viernes'. En los bises, el portorriqueño regaló como despedida 'Tu amor me hace bien' y, por supuesto, la más esperada de la noche; 'Vivir la vida'.
Con el concierto, Marc Anthony consiguió lo imposible: a medida que avanza la noche, las temperaturas suelen ser más frías, salvo en el caso de un espectáculo de música latinoamericana y salsa tan tórrida.
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