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Tomás Sánchez Santiago, en la Casa Consistorial de Valladolid. Gabriel Villamil
«No soy novelista: son las novelas las que me asaltan a mí»

«No soy novelista: son las novelas las que me asaltan a mí»

Tomás Sánchez Santiago recibe el XVII Premio de la Crítica por 'Años de mayor cuantía'

Samuel Regueira

Valladolid

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Sábado, 1 de junio 2019, 19:37

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El escritor y colaborador de El Norte de Castilla Tomás Sánchez Santiago recibió este sábado el Premio de la Crítica por su novela 'Años de mayor cuantía', organizado por el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua. Es este su segundo trabajo en este género tras 'Calle Feria', publicado hace más de diez años, si bien el autor, más prolífico en poesías y ensayos, se resiste a ceder bajo el encanto de este particular formato: «No soy novelista: son las novelas las que me asaltan a mí», afirmó en declaraciones a los medios previas a la celebración del acto en el Ayuntamiento de Valladolid, donde se le entregó un lienzo obra de Adolfo Alonso Ares.

Asume Tomás Sánchez Santiago con «sorpresa y un cierto sentido de la responsabilidad» la recepción de este premio, para una novela en la que lleva trabajando desde la publicación de 'Calle Feria' y que nació «sin vocación de ser larga» y que creció «de forma tentacular, hasta el punto de que terminó por configurarse a sí misma».

'Años de mayor cuantía' se desprende de la etiqueta de costumbrista y asume, desenvuelta, la condición de novela política: «Todos somos hijos de nuestra época», afirma el autor, resaltando con vaguedad intencionada que algunos pasajes bien pudieron pasarle, o bien no. La condición autobiográfica, resaltada por la aparición de personajes reales, viene a prorrogar un ardid tan viejo como la literatura misma: llegar a hablar de lo universal partiendo de lo particular: «Arranca en los años finales de la década de los sesenta, principios de los setenta», explicó, «en los que el tejido del franquismo se desmoronaba, algo que viví con mucha intensidad; y la aparición de la democracia, recién inaugurada, a la que muchos mirábamos con cierto recelo». Citó, además, las palabras de Miguel Torga: «'Lo local es el guante con lo que se toca el universo', de igual manera que aquello que sucede 'En un lugar de la Mancha...' nos concierne a todos», dice quien se considera maestro de Cervantes, que le enseñó «a buscar la elasticidad y la musicalidad de nuestra lengua, y la generosidad de que el relato pertenece a todos».

Preguntado también sobre la confluencia poco habitual de aplauso entre crítica y público, este último traducido en la aparición de sucesivas ediciones de 'Años de mayor cuantía', Tomás Sánchez Santiago declaró su obra como una novela «cómoda, nada pura, como un polígono irregular». En ella, su mezcla de géneros, de tonos y de voces en esta «vida de cualquiera en una época de superhéroes, que eclipsan a los verdaderos responsables de la épica ciudadana» se traduce en «un artefacto cuyos desiguales lados son capaces de conseguir resultar del agrado de muchos lectores, por muy diferentes que sean entre sí».

Un encuentro clave

El Ayuntamiento de Valladolid acogió la entrega de este premio, auspiciado por Ana Redondo, concejala de Cultura; Mar Sancho, directora general de políticas culturales de la Junta de Castilla y León, y Gonzalo Santonja, director del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, Gonzalo Santonja: «Queremos que este encuentro ya clásico en la Feria sea clave en la reunión entre escritores y lectores, y entre la calidad y quien mejor sabe apreciarla: los críticos», manifestó Redondo.

Por su parte, Sancho puso en valor el Premio de la Crítica por «estar vinculado a la actualidad editorial, al que el autor no se presenta y marca la diferencia entre lo que ya existe y es relevante», además de por representar «el esfuerzo de autores consagrados y futuras promesas de esta tierra, una confluencia muy oportuna entre lo cuajado y lo que va cuajando en nuestra comunidad». De Sánchez Santiago destacó la mezcolanza entre lo propio y lo universal; «un producto cuasiperfecto que aúna voces, tonos y géneros en uno de los mejores ejercicios literarios: partiendo de hechos pequeños y llegando a palabras grandes». No olvidó tampoco la directora a la editorial, Eolas, «exquisita en sus publicaciones y uno de los revulsivos culturales de Castilla y León».

Por su parte, Santonja comparó la literatura de Sánchez Santiago con la labor del topo, «que horada en la sociedad y que aflora con imágenes deslumbrantes de nuestro entorno». Sus proezas literarias «no son de las que emergen en los premios», resaltó, por lo que consideró más que pertinente que el XVII Premio de la Crítica reconociese estos esfuerzos, «doblemente meritorios al haber sido publicados por una editorial castellanoleonesa». El acto también tuvo palabras de recuerdo para el escritor José Manuel de la Huerga y el artista Félix de la Vega.

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