Castilla y León vuelve al millón de ocupados trece años después pese a la ligera caída en Valladolid
El número de desempleados cae en la comunidad en 8.700 personas en el segundo trimestre del año
El número de parados inscritos en las oficinas de Empleo de Castilla y León cayó en 8.700 personas en el segundo trimestre de 2022, y la cifra de desempleados en la comunidad baja ya de la barrera de los 120.000, según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
La caída, acrecentada en el mes de junio, en el que el empleo creció más de un 50% con respecto a los meses de abril y mayo, con 4.707 parados menos, mantiene la línea descendente de todo el año.
El crecimiento del empleo en la comunidad se constata en el hecho de que Castilla y León ha recuperado el millón de trabajadores activos, con 1.007.300 personas ocupadas, una cifra que no se alcanzaba desde 2009; mientras que a nivel nacional se superan los 20 millones que empleados, tal y como recoge este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el caso de la tasa de paro, baja al 10,19% en la comunidad, frente al 11,08% del trimestre anterior, 2,29 puntos inferior que la media que cae hasta el 12,48%, mientras que la tasa de actividad sube al 55,27%, de nuevo inferior que la del resto del país donde sube al 58,71%.
En el segundo trimestre de 2022 la población activa de Castilla y León se situó en 1.121.700 personas, lo que situó la tasa de actividad en ese 55,27% (58,71% a nivel nacional).
Por sexos, la tasa de actividad entre los hombres se situó en el 59,35% (63,73% a nivel nacional), con 539.000 varones ocupados y 53.500 en paro (la tasa de desempleo para este colectivo es del 9,03% frente al 10,99% del resto de la nación).
Entre las mujeres la tasa de actividad en Castilla y León se situó en el 51,32% (53,97% en España), con 468.400 mujeres ocupadas y 60.800 en paro (la tasa de desempleo fue del 11,49% frente al 14,15% de España).
El paro sube en Valladolid
La caída del paro generalizada no se ha desarrollado en Valladolid en el segundo trimestre, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Pese a que en España el número de desempleados se quedó por debajo de los tres millones por primera vez en trece años, en Valladolid la estadística es negativa con cien parados más entre los meses de abril y junio de 2020 (los desempleados pasaron de 22.400 a 22.500).
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Este dato contrarrestra con el hecho de que también se registró un mayor número de ocupación, ya que la población con trabajo pasó a ser de 217.700 personas, por las 215.600 con las que terminó el primer trimestre de 2022. La tasa de paro en la provincia vallisoletana baja ligeramente, y se sitúa en el 9,35%, mientras que la nacional está en un 12,5%..
El sector servicios fue el que generó más empleo en Valladolid, al pasar de 157.300 ocupados a 162.100. De hecho, este incremento compensa la caída que se han registrado en otros sectores, como la industria (3.100 ocupados menos) y la construcción (900 parados).
Las consecuencias de la inflación
El secretario de Acción Sindical y Diálogo Social de UGT Castilla y León, Raúl Santa Eufemia, destacó este jueves que los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) son «alentadores», después de que la comunidad alcance el millón de ocupados y vuelva a los niveles de empleo de 2009, aunque advirtió que no ocurre lo mismo con las previsiones económicas, dada la incertidumbre que provoca la elevada inflación y el incremento de los tipos de interés, recoge Ical.
Además, el dirigente de UGT también hizo referencia a la crisis energética que está provocando la guerra de Ucrania y a la escalada de los precios del gas y del petróleo, por lo que planteó que ante un escenario económico tan incierto como el actual es más necesario que nunca que los gobiernos, tanto el estatal como el autonómico, alcance acuerdos con los agentes sociales en materia de empleo y de renta para dar la máxima estabilidad posible a los mercados.
Por su parte, la CEOE Castilla y León considera que, pese a los buenos datos conocidos de la EPA, hay que «mantener la cautela, más aún en un contexto de revisión a la baja de las expectativas de crecimiento económico», por lo que se considera «prioritario» reforzar la eficacia de las políticas activas de empleo y, en especial, de la formación permanente.
En un comunicado, los empresarios también recalcan que habrá que seguir la evolución del empleo en los próximos meses y «mantenerlo como prioridad», pues la inflación y la incertidumbre pueden contraer la contratación, razón por la cual es imprescindible evitar efectos inflacionistas de «segunda ronda» y generar un clima de confianza que impulse las inversiones.
