Mueren cinco personas en las carreteras de la comunidad en los últimos tres días

Desde el pasado domingo y en solo tres días ya se han contabilizado cinco víctimas mortales en las carreteras de Castilla y León, una cifra sin duda elevada que ha puesto en alerta a las autoridades cuando todavía queda por desarrollarse la segunda fase de la operación especial de tráfico con motivo de la Semana Santa.

Este martes está siendo especialmente trágico en las vías de la comunidad donde se han dejado la vida tres de los cinco fallecidos en las últimas 72 horas. Una mujer de 67 años ha quedado atrapada en su vehículo tras producirse una colisión múltiple en la A-67 a su paso por Villamañán (León) a primera hora de la tarde. Los efectivos sanitarios desplazados al lugar confirmaron su muerte en el acto.

Pasadas las nueve de la mañana, en El Espinar (Segovia), el conductor de una furgoneta fallecía también como consecuencia del choque de su vehículo contra un camión en el kilómetro 66 de la N-VI. El camionero resultó herido grave y tuvo que ser excarcelado por los bomberos.

Y ya de madrugada, en la provincia de Salamanca, el conductor de otro camión, de 59 años de edad, murió tras sufrir una salida de vía y volcar su vehículo en el kilómetro 351 de la A-62, sentido Burgos, a la altura de Fuentes de Oñoro.

El segundo día con mayor siniestralidad de los últimos tres fue el domingo cuando dos personas fallecieron en las carreteras de Castilla y León. Se trata de un varón de 40 años, vecino de Cevico de la Torre (Palencia), que conducía una moto. Al parecer, chocó frontalmente contra un turismo en la carretera PP-1011 (Alba de Cerrato-Palencia). Según las primeras hipótesis que baraja la Guardia Civil, el motociclista invadió el carril contrario en una curva de nula visibilidad e impactó con el turismo que circulaba de frente y que iba ocupado solo por su conductor, que resultó ileso.

Esa misma mañana, en Soria, el choque entre una furgoneta y un camión en la carretera CL-101 se saldó con un muerto y un herido muy grave en el punto kilométrico de la carretera CL-101, en el término municipal de Ágreda.

Por todo ello, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virgina Barcones, ha pedido «máxima prudencia» a los conductores de cara a los próximos días. En declaraciones ofrecidas a los medios en la provincia de Ávila, recogidas por Ical, Barcones ha hecho un «llamamiento a la prudencia y la máxima observación de las normas de tráfico y seguridad vial» tras unos «días negros en nuestras carreteras» durante la primera fase de la Operación Especial de Semana Santa, transcurrida entre los días 8 y 10 de abril, y a la que sucederá una segunda fase del 13 al 18 del mismo mes en la que se espera «más movimiento, por encima del millón de vehículos».

Ante la llegada de esos días, Barcones reiteró su llamamiento a «la responsabilidad y la prudencia» para «cuidarse uno mismo, de la familia y de todos», mientras recordó que existe un dispositivo de la Guardia Civil de Tráfico con más de 1.000 agentes dispuestos para «protegernos, ayudarnos y garantizar el cumplimiento de las normas de tráfico y de seguridad vial», así como que «no circule nadie que no las respete y ponga en peligro la seguridad de todos».

«Vamos a seguir trabajando con toda la intensidad pero necesitamos la colaboración de todos aquellos que van a viajar», concluyó Barcones, que reiteró de nuevo su petición de «máxima prudencia» para reducir los accidentes «con la complicidad y el esfuerzo de todos».

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