Catorce pueblos de Ávila estudian alegaciones contra la ampliación de una macrogranja

«La idea como presidente es presentar alegaciones, luego se estudiará más detenidamente porque nos falta información, pero existe una lógica preocupación porque tenemos una toma de agua muy cerca», manifestó el presidente de esta entidad, Vidal Galicia.

Luis José Martín, de la Asociación Cultural la Alhóndiga, confirma que también alegarán contra este proyecto por la proximidad de la explotación a la captación de agua La Moraña, de la que se surten estos 14 núcleos. «El agravante está en que se encuentra en una zona muy peligrosa, al borde del Adaja, en concreto, a 145 metros del cauce y 100 metros más abajo está la captación de agua para Arévalo y toda la zona».

A ese temor a que se pueda contaminar el agua añade que en el propio casco urbano de Arévalo, a pesar de que el término municipal de la granja es Espinosa de los Caballeros, «los olores son insufribles y no creo que esa sea la mejor carta de presentación turística y por otra parte, se tienen que deshacer periódicamente de los desperdicios. Esta zona ya sufre bastante por los nitratos y cuantas más granjas, más excrementos que habrá que esparcir por las tierras».

Su teoría es que las denominadas macrogranjas «no generan puestos de trabajo porque esta explotación va por la cuarta fase y tiene cuatro empleados; para la ampliación de la que hablan ahora tan solo contemplan un empleado».

Luis José Martín lamenta que la legislación de Castilla y León sea «bastante permisiva, las granjas pueden estar a 1.000 metros del núcleo».

Julio López, de equipo de Gobierno de Arévalo Decide, se muestra contundente a la hora de indicar que ese Consistorio sí que va a presentar alegaciones al proyecto. «Existe un riesgo muy alto debido al deterioro de las aguas de boca y en el futuro vemos peligrar la captación del Adaja » . La realidad actual es que «este agua ya huele mal, sabe mal y si hay un incremento de los animales el problema va a ser cada vez mayor, existe una preocupación muy grande».

La empresa promotora de esa explotación es Nilasa SA, con sede en Madrid, y fuentes de la misma aclaran que « siempre cumplimos los permisos y la normativa».