«En España hay dos alternativas: medidas responsables o el corralito de Grecia»
Pablo Casado, Vicesecretario de Comunicación del Partido Popular
SONIA ANDRINO
Sábado, 25 de julio 2015, 09:05
El hombre de la camisa roja no dejaba de mirarle, aunque no le saludó, mientras Pablo Casado (Palencia, 1981) pagaba la cuenta en un local de la calle Zurbano, en Madrid. No llegó a diez euros. Alguna botella de agua, un café y un refresco. Lo que demandaba el fuerte calor de la tarde del martes. Casado se ha convertido en un personaje conocido en un momento en el que el protagonismo político ya no cotiza al alza entre los ciudadanos. El cliente del local tardó en volver la vista al periódico que tenía en la mesa, seguía pendiente de la conversación, pero no le llamó la atención, todo una declaración a tener en cuenta para quien se tiene que encargar de acercarse a la ciudadanía a través de la comunicación. Es el vicesecretario responsable de esta materia en el Partido Popular, el encargado de elaborar el mensaje que su partido estrujará en los próximos meses con el ánimo de recuperar la confianza perdida y, aunque todavía no está cerrado, no habrá mucho espacio para las sorpresas: se hablará de la herencia recibida («por mucho que le pese al PSOE, que está muy reciente y la seguimos pagando»), de recuperación económica («sería una irresponsabilidad no hacerlo en un país con cuatro millones de parados») y de política social («el PP es el partido más social de España») pero incorpora la necesidad de «hablar de futuro, porque así es como se ganan las elecciones», apelando a Mitterrand. Para eso, dice, sirvió la convención política del PP, en la que los populares analizaron lo que les queda por hacer. En primer lugar, consolidar la curva de crecimiento de empleo. «Tú puedes vivir de la inercia durante unos años, como le pasó a (José Luis Rodríguez) Zapatero, pero si tú no sigues haciendo reformas estructurales, la locomotora se acaba deteniendo por la fricción con el raíl». En segundo lugar, «no se puede hablar de recuperación sin acordarse de quien peor lo está pasando y por desgracia en España hay millones de personas que lo siguen pasando muy mal». Y en tercer lugar, la regeneración. «A la gente le importa muy poco lo que nosotros hagamos en nuestro partido, a la gente lo que le importa es cómo podamos revitalizar institucionalmente y políticamente España». Y para ello, el PP plantea limitar mandatos, hacer una reforma electoral en la que el ganador gobierne, pactada con el principal partido de la oposición, e incluso «una actualización del proceso constitucional».
¿Se refiere a la posibilidad de reformar la Constitución como apuntaba el presidente del Gobierno?
No hace falta reabrir la caja de Pandora de la Constitución, y además no consideramos que el clima político en España tenga los mimbres como para hacer un cesto dentro del consenso de unos puntos de acuerdo, pero sí que pensamos que se puede perfeccionar en el papel del Senado, en el de la justicia, en el de los partidos políticos dentro de la representatividad pública y política.
Pero el presidente se refirió a la posibilidad de cambiar la Constitución
O no. Tú puedes cambiar la Constitución como se ha hecho en España dos veces, pero si sabes exactamente lo que quieres cambiar. Lo que es irresponsable es decir: «vamos a reformar la Constitución», ¿para qué? No se puede dejar abierto. El papel del Senado, cámara de primera lectura de legislación que afecte fundamentalmente a las autonomías y para aprobar estatutos de autonomía, no necesita una modificación de la Constitución. La actualización del papel de los partidos políticos para que los afiliados se sientan perfectamente representados con las decisiones que ellos toman, tampoco implica una reforma constitucional, por eso hablamos de actualizar el marco. Somos el único partido, probablemente junto con Ciudadanos, que pensamos que ese marco sigue vigente y es perfectamente válido.
Lenguaje de las urnas
Rajoy anunciaba esta semana «importantes novedades» en el PP pero sin concretar, ¿no están tardando demasiado en entender el lenguaje de las urnas del 24M?
Hemos cambiado el 80% del comité de dirección. Si en un periódico se cambia el 80% de los jefes de sección, sería un cambio importante, ¿no? Siempre sumando porque al final todos somos personas que ya veníamos colaborando con el partido y los que estaban, siguen ocupando importantes responsabilidades en el grupo parlamentario. Creo que la conferencia política, si algo se ha visto, es que quiere haber un cambio en las formas y no solo es una cuestión de los colores, el logotipo o la puesta en escena, sino en el fondo. Junto a ello, tenemos que tener nuevas ideas, que puede ser desde la política tributaria, bajando impuestos, pasando por la política social o seguir luchando contra la corrupción, que es uno de los temas que más votos nos ha hecho perder. Hay que seguir explicando y legislando para que se haga absolutamente incompatible con el ejercicio público cualquier actitud corrupta.
En la conferencia política, usted ha sido de los pocos que ha hablado de ello, ¿el resto han pasado página o siguen escondiendo la cabeza bajo la almohada?
Yo creo que al final hemos hecho mucho y quizá la ciudadanía española no lo ha visto del todo. Tenemos el marco legislativo más draconiano, más exigente a la hora de ejercer un servicio público y eso los ciudadanos no lo están percibiendo. Es verdad que en las urnas, los ciudadanos son más indulgentes con la corrupción de la izquierda que con la nuestra. Pero eso a mi no me preocupa, eso nos debe enorgullecer porque quiere decir que los ciudadanos consideran que la corrupción es incompatible con el Partido Popular y creo que es una seña de identidad que hay que seguir enarbolando. Cuando en Andalucía, a Susana Díaz no le pasan factura los escandalosos casos de corrupción pues, hombre, al principio nos da un poco de rabia y decimos, cómo es posible que sigan cuatro años más dos gobiernos presuntamente corruptos de los que, de uno de ellos, ella fue parte. Pero también, por otro lado, decimos que lo que quiere decir es que nosotros somos los que tenemos que llevar esa bandera.
O sea que no lo han explicado bien La comunicación, la culpa siempre es de la comunicación. ¿Cree de verdad que, por ejemplo, las calamidades que están viviendo muchas familias a cuenta de la crisis y de las políticas gubernamentales se solucionan con comunicación?
No, al final lo de que el partido comunica mal, es el típico tópico que no es real. El problema es más de política que de comunicación.
¿No será un problema de gestión?
No, yo creo que la gestión ha sido buena. No es que no estemos comunicando, es que a lo mejor el mensaje no llega de forma tan nítida.
El PP de Ávila y Soria
Casado no repara, en este punto, en que el hombre de la camisa roja acaba de entrar en el bar. Pide un café y coge un periódico. Es su canal con la información que ofrece, por ejemplo, el Partido Popular. La conversación continúa centrados en el mensaje y su análisis sobre lo que llega de él. Compara, por ejemlo, los 36.000 desahucios que dice que ha paralizado el PP en esta legislatura y que sin embargo «no están en el imaginario de la gente», con las «varias decenas que ha alardeado» durante la campaña electoral, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. «¿Es comunicación? ¿Es prejuicio social? ¿Es una buena propaganda por parte de la izquierda?». Responderse entra dentro de sus deberes inmediatos porque en el partido, explica, no hay tiempo para el descanso. Las ojeras que acompañan su rostro afable, sonriente y cercano, hacen gala de ese esfuerzo que se completa con el viaje diario de hora y media desde Madrid hasta Las Navas del Marqués (Ávila) donde le aguardan su mujer y sus dos hijos. Luce con brillo la alianza en su mano izquierda y se proclama castellano y leonés «por los cinco costados». Su procedencia palentina y su trabajo como diputado por Ávila le llevan hablar de Castilla y León con propiedad. No lo oculta. Utiliza siempre la primera persona del plural cuando se refiere a la comunidad.
Supongo entonces que sufre con sus problemas. En el conflicto de la minería, ¿de qué lado está: del de Herrera, que clama a Rajoy por un apoyo real al sector, o del de José Manuel Soria, que hace caso omiso a esas peticiones?
Yo creo que en estas cuestiones no solo hay los blancos y los negros, existen los grises y en este sentido hay que intentar hacer posible que en un marco de restricción presupuestaria se pueda dar una salida a un colectivo que ha sido muy importante para la región. Estoy convencido de que las negociaciones del gobierno regional con el nacional llegarán a buen puerto y además, tanto Soria como Herrera son personas de partido, que han lidiado contenciosos complicados, y que hay tiempo para llegar a un acuerdo.
Precisamente por este motivo, Herrera ya advirtió a Rajoy de que por uno o dos diputados de León se puede perder el Gobierno de España, estará usted de acuerdo conmigo en que es real, a la vista de cómo se perdió en la medianoche del 24 de mayo el procurador que habría dado la mayoría absoluta al PP en la Junta
Espero que no ocurra eso, que no haya una pérdida de diputados en noviembre porque nos jugamos muchísimo y contamos con todos los diputados de Castilla y León.
La cosa está complicada. Conflicto interno en Ávila (con el motín de alcaldes y diputados provinciales contra Antolín Sanz); conflicto interno en Soria (alcaldes que firman manifiestos contra la presidenta provincial); se han perdido las mayorías absolutas en todas las capitales, ¿empieza el declive del PP en el que siempre ha sido el granero de votos?
Yo creo que en Castilla y León el partido está en forma. No es que seamos un granero porque nos ha caído una bendición divina, todos sabemos que en Castilla la tierra cuesta trabajarla. La situación en Ávila no ha sido de nuestro agrado y creo que en las puertas de unas elecciones generales, es muy importante que las dos instituciones principales (Ayuntamiento y Diputación de Ávila) estén alineadas con la estrategia de la dirección provincial del partido para hacer una buena campaña y tener un buen resultado. Y en Soria, igual. Más allá de las discrepancias puntuales, lo importante es el proyecto que nos une y no debemos perder ni un minuto en nuestros problemas internos. Demasiados problemas tiene España como para que nos perdamos en nosotros.
El PP de Ávila pasó del 62% de los votos en las generales de 2011 al 45% en las europeas de 2014 y en las autonómicas de este año. Son muchos miles de votos los que se han dejado ustedes en la cuneta. ¿Cree de verdad que cuando un voto se va hay forma de convencerlo para que vuelva?
Creo que los ciudadanos cuando van a la abstención lo que están diciendo es que les des una excusa para que te vuelvan a votar y lo que hemos demostrado en las últimas elecciones es que los votos que hemos perdido se han ido a la abstención. Ha habido una escasa transferencia de voto a otras formaciones políticas. Creo que nuestra principal obsesión es recuperar a los que no han cambiado de equipo y solo quieren que empecemos a jugar bien y a meter goles.
¿Cómo convencería a un parado de que tiene que votar al PP?
Somos el partido que crea más empleo y no solo ahora sino cuando hemos gobernado en cualquier sitio, y no por nosotros sino porque creamos las condiciones para que autónomos, empresarios y pymes, lo hagan.
¿Cómo trataría de asegurarse el voto de un jubilado que tiene que mantener a sus hijos porque estos no encuentran trabajo?
Hemos revalorizado las pensiones (más de 2.000 millones esta legislatura) y los supuestos progresistas las congelaron injustamente.
Bancos en condiciones
¿Cómo se dirigirá a un ahorrador que lo fió todo a las preferentes y salió perdiendo?
Somos el partido que hemos acabado con un sistema de cajas de ahorro que era ineficiente y que no tuvo la supervisión y el control necesario. Hemos cambiado el sistema que aprobó Alfonso Guerra en 1985 y a partir de ahora los bancos tendrán que rendir cuentas y limitaciones de sueldo cuando hayan recibido alguna ayuda estatal. Ahora los bancos están absolutamente en buenas condiciones no como cuando otros nos dejaron en la quiebra.
¿Cómo pedirá que le vote alguien que confió en ustedes en 2011 y que ahora se muestre desencantado por las políticas de Rajoy?
Con la humildad de reconocer que hemos cometido errores pero con el orgullo y la convicción de pensar que somos la alternativa de futuro.
¿Y qué le dirá a un votante que por primera vez se dirija a las urnas y que lleva los últimos años escuchando hablar de recortes, crisis, reducción de derechos sociales, etc?
Que para crisis, recortes y quiebra de derechos sociales, los que ha habido en Grecia y los que intentan tapar aquellos que ondean la bandera griega e incluso esta semana, cayéndose por el precipicio y tirando al pueblo griego por la borda, seguían diciendo que ese era el modelo para importar a España. Si el modelo para importar a España es Grecia y Venezuela, a ese joven, por sus ahorros, por su vida y por su futuro, es justo lo que no le conviene.
El modelo de España, ¿ha desgastado al Partido Popular?
Creo que hay un desgaste evidente cuando se gobierna en una crisis económica, sobre todo cuando eres responsable de las políticas económicas. Lo hemos visto en Grecia. Si es que no hay alternativa, la alternativa son medidas responsables o e corralito. En Grecia han intentado eludir las medidas impopulares echando un pulso a los socios comunitarios y al final, han tenido que tomar doble ración de aceite de ricino porque han perdido seis meses en los que la economía ha empeorado estrepitosamente. En España decidimos hacer las medidas difíciles y, evidentemente, eso a los ciudadanos no les gusta, pero las reformas han tenido su efecto. La política social que ahora podemos poner en marcha, no podíamos hacerla hace unos años porque no teníamos directamente recaudación para ello. Ahora es cuando se puede hacer política social.
¿Qué tipo de política social?
Por ejemplo, bajar impuestos. Para mí no deja de ser otra política social porque la gente tiene más dinero en el bolsillo, puede consumir más y habrá que producir más y eso redundará en una mayor creación de empleo. Pero las cosas se pueden hacer cuando se pueden hacer.
Y eso, ¿cómo se va a notar?
Creando empleo. Lo que no se puede hacer es política social pidiendo una ronda y que paguen los que vienen después. Endeudar a tus hijos no es hacer política social.
¿Cree que esos recortes pasarán factura al candidato, Mariano Rajoy, en las generales? Herrera le recomendó que se mirara al espejo antes de tomar la decisión...
Yo creo que hay que completar esa frase. Él dijo que una vez que se mirase al espejo, si decidía presentarse, tendría la legitimidad y el acuerdo de todos. Y eso es lo que ha hecho. Mariano Rajoy encarna la experiencia, la fiabilidad y la estabilidad que necesita España. Los candidatos que tiene en frente no han gestionado un euro en su vida, ni de su propio partido, entonces, como padre de dos hijos que soy, yo prefiero dar mi voto a alguien que sepa gestionar mis impuestos de forma eficaz y experimentada. Lo que tenemos en frente son partidos sin ideología (Ciudadanos). Podemos es un partido de una ideología absolutamente extrema y radical y el PSOE es la muleta de Podemos. Al final hay dos alternativas, o el centro derecha moderado liberal en España o la radicalidad de Podemos con su cuadrilla taurina que son los que van a poner en suerte el toro que es acabar con bienestar que hay en España.
Dice usted que Rajoy cuenta con el apoyo de todos, ¿también de José María Aznar?
Sin duda. José María Aznar dijo que, además de la mujer de Rajoy, nadie desea tanto el éxito de Mariano Rajoy como él. Aznar hizo una campaña absolutamente imprescindible en las municipales y autonómicas, muy generosa y muy positiva para el presidente. Él fue quien dijo que el que estuviera descontento, que vuelva, que esta es su casa.
Y también dijo en esa campaña: «Si alguna vez me tiene que renovar alguien, que me renueve Casado, que es un tipo estupendo»..
Yo he trabajado tres años con él y tenemos una relación extraordinaria. Vino a mi tierra y me hizo un guiño inmerecido y generoso, pero no va más allá. Él está muy contento de que yo esté trabajando con Rajoy. Y he de decir que si de algo puedo alardear es de que soy un ejemplo de que en el partido estamos todos a una. He trabajado con muchos jefes, siempre he sido leal a ellos. Aquí todos tenemos un mismo objetivo que es servir a los españoles.
También Herrera da su nombre cuando habla de regeneración y hay quien ha empezado a verle como futuro presidente del gobierno...
Que va... Yo creo que Juan Vicente es una persona de las que se aprende en política. Es humilde, pegado a la tierra. Y yo me alegré muchísimo de que siguiera al frente de la Junta de Castilla y León. Él se refirió a mí como una generación, la de las personas que nos vamos incorporando a la política.
Ustedes hablan de renovación, sin embargo están llenando los escaños del Senado por las representaciones autonómicas de dirigentes derrotados en mayo. Incluso ahí está un Juan José Lucas que va a por el cuarto lustro de senador
Bueno pero también tenemos senadores muy jóvenes. Esto de ir con el carné de identidad entre los dientes es de los partidos nuevos porque intentan tener cierto sectarismo generacional. Conozco jóvenes con ideas muy viejas, como los de Podemos, y gente que peina canas con ideas regeneradoras. No es una cuestión de edad.
De cualquier forma, usted pertenece a una nueva hornada de dirigentes. ¿Mantendrá usted su vocación nacional o con el tirón mediático y la necesidad de cambios en la estructura regional le veremos dar el paso a la política autonómica?
Yo espero que en las próximas elecciones mis compañeros de Ávila sigan contando conmigo para representarles en el Congreso. Les estoy muy agradecido a los abulenses por que me eligieran y al partido provincial por darme la oportunidad.