Embarazo en época de coronavirus: «Aplaudimos la labor sanitaria, nos ha dado normalidad en un momento complejo»

Tener miedos y dudas durante el embarazo es algo normal, lo es menos si no se es padres primerizos, como les ocurre a los burgaleses Fran Salvador y Laura García. Ellos ya tienen una niña de casi tres años y ahora Laura está embarazada de 36 semanas, les quedan cuatro semanas para conocer al nuevo miembro de la familia y este embarazo, como reconocen, «no tiene nada que ver con el anterior». La crisis sanitaria por el coronavirusles ha cambiado todos los planes y les ha generado «incertidumbre».

Estos días tan especiales para estos padres están marcados por la pandemia. Fran y Laura explican cómo está siendo su rutina en relación con el embarazo en un momento marcado por el estado de alarma decretado por la expansión de la COVID-19. El lunes pasado tuvieron un control con la ginecóloga, explican que lo que hacen ahora en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) es espaciar las citas mucho en el tiempo para reducir el contacto en las salas de espera. Fran pudo acompañar a Laura pero no pudo entrar en la consulta. «También tienes que ir con guantes y mascarilla. Los médicos y enfermeros también lo llevan. Cuando entramos al hospital no había nadie, era un hospital fantasma. En el parking también estás obligado a pagar con tarjeta, por ejemplo», puntualiza Laura.

Reconocen que estas medidas les aportan «tranquilidad». Fran señala que «te das cuenta de que están separados los bloques en los que se trata a pacientes con coronavirus, también tienen otras entradas, se ha reducido la fluidez de gente en el hospital. Hay cero contacto».

Pero son momentos de inseguridad y Laura reconoce que, la noche anterior a la consulta, no durmió pero «salí tranquila. De hecho, tengo una amiga que también está embarazada y le transmití tranquilidad tras salir del HUBU». Comprobar el trabajo que se está haciendo desde el ámbito sanitario ha tranquilizado a estos padres pero hay dudas con respecto a cómo la COVID-19 afectará a sus planes.

Por el momento, no tienen que volver más al HUBU pero Laura sí debe acudir a su centro de salud a hacerse una analítica, «si está todo bien solo tendré que volver al HUBU para dar a luz». En los centros de salud también se han reducido las consultas al mínimo, Fran cuenta que cuando fue a recoger la baja de Laura no tuvo que acceder siquiera a los pasillos y se mantuvo la distancia en todo momento».

Igualmente, otro aspecto cambiará. En estos momentos felices, en los que gusta tener a la familia y amigos cerca para compartir la alegría de la llegada de un nuevo miembro a la familia, en función de cómo siga la situación, puede que Laura y Fran no puedan tenerlos cerca. En el primer parto Laura tuvo a su pareja al lado pero después recibió visitas de todos sus seres queridos. Ahora, solo Fran podrá entrar con ella al paritorio y también será el único que pueda estar en la habitación. Nadie más, no se permiten las visitas.

«Habíamos pensado que Fran me acompañase en el parto y después se quedase conmigo mi madre para que Fran estuviese con nuestra otra hija. No podrá ser así», explica Laura. Serán los abuelos los que se queden al cuidado de la niña mientras ellos están en el hospital.

La estancia allí, después de las medidas que comprobaron que se habían adoptado en el HUBU, no les preocupa tanto. «Nos dan todo el material de protección y solo entrará una enfermera por habitación para controlar la cadena de contagio y poder hacer una trazabilidad más fácil en caso de contagio», explica Fran.

Les preocupa más la salida del hospital. Creen que tendrán que guardar cuarentena, lo que alargará aún más el reencuentro con su hija. Aunque todo variará en función de cómo avance la pandemia. «Lo que más nos preocupa ahora es nuestra hija, por cómo va a reaccionar al estar tanto tiempo sin vernos. Ella sabe que no puede salir a la calle, que en poco tiempo llegará su hermanito pero no sabe todo lo que supone», apunta Laura.

«No tenemos incertidumbre por el tema sanitario, porque vemos que está controlado en cuanto a nuestros pasos a seguir, nos preocupa más la vida con respecto al exterior», confiesa esta pareja. Es una mezcla de sentimientos, «ya has sido padre pero esto no tiene nada que ver con el anterior porque se nos añaden una serie de retos extra», explica Fran.

Fran y Laura se mantienen optimistas y en este momento complejo demuestran tranquilidad y prefieren dejarse por la alegría que produce saber que en breves conocerán a su nuevo hijo. Su actitud en estos momento es muy importante, su colaboración y reconocen que «lo que más aplaudiría es la labor sanitaria que, con esfuerzo, han conseguido darnos normalidad en un momento complejo».

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