Fátima Báñez (PP) acusa al PSOE del debacle de la industria del automóvil

»Desde que gobierna el señor Sánchez» hay «un 26% más de expedientes de regulación de empleo en España», entre ellos «en un sector tan importante y tan estratégico como es la industria del automóvil», criticó la dirigente popular.

«Hoy, en Nissan», puntualizó, pero «ha pasado también en otras marcas» españolas. «Yo lo que pido es que haya un gobierno que no genere incertidumbre» sino «confianza» y haga «lo que ha hecho el PP siempre: bajar impuestos, apoyar a las empresas y, sobre todo, fortalecer a las industrias del automóvil» que, según Báñez, «es un gran ejemplo de lo bien que se hace en esta comunidad autónoma de Castilla y León».

«Los esfuerzos que han hecho» tanto las diputaciones como la Junta de Castilla y León para «apoyar la industria del automóvil», en «nueve meses lo ha tirado por la borda la subida de impuestos y la subida de cotizaciones sociales y la incertidumbre» del gobierno de Pedro Sánchez.

Por eso, según Báñez, en las próximas elecciones «nos jugamos continuar con esa recuperación y con el crecimiento económico y seguir en la senda de creación de oportunidades» o «poner en riesgo esa senda de recuperación» que ha seguido el PP «en los últimos siete años».

Por otra parte, el candidato socialista a la presidencia de la Junta de Castilla y León, Luis Tudanca, acompañó al número uno al Senado del PSOE abulense, Jesús Caro, en sendas reuniones con el comité de empresa de Nissan y con los trabajadores de las empresas auxiliares, manifestando su apoyo a las reivindicaciones planteadas, en torno a la creación de una mesa de trabajo con Nissan, los propios trabajadores y la Junta de Castilla y León para «amortiguar en lo posible la pérdida de puestos de trabajo» en el «periodo valle» de transformación de la planta de Nissan Ávila, entre septiembre de 2019 y abril de 2020.

«Volvemos a estar en una situación de incertidumbre», indicó Luis Tudanca, acordándose de la firma del plan industrial de Nissan para la planta de Ávila en junio de 2018 y que supuso «un desembolso de 50 millones» que «salen del bolsillo de los castellanos y leoneses para apoyar estos puestos de trabajo».

«No puede ser que apenas un año después de este acuerdo unánime», que contó con el apoyo social, sindical y político, y con la asunción, por parte de los trabajadores, de «importantes sacrificios» como una reducción de su salario, «volvamos a estar ante una situación de incertidumbre para los trabajadores y trabajadoras de Nissan y de las empresas auxiliares», protestó Tudanca.

Tudanca criticó que el Partido Popular saliera «poniéndose medallas que no eran suyas» cuando se firmó el plan industrial de Nissan hace un año. «Eran del conjunto de la sociedad abulense y de Castilla y León», recalcó. «Un año después no sabemos si hay futuro para los 150 trabajadores de las empresas auxiliares» y «esta incertidumbre debe terminar». Aun así, recalcó que el PSOE «no va a hacer batalla partidista de esto», porque «lo importante es el futuro de estas familias» y «vamos a hacer lo posible para el mantenimiento de estos puestos de trabajo».

Por su parte, la candidata socialista al Congreso, Margarita Robles, se reunió con la directiva de la Confederación Abulense de Empresarios para conocer sus reivindicaciones. «Sabiendo los problemas que tiene Ávila de despoblación», así como la situación de la pequeña industria y el comercio, Robles ha presentado la estrategia del Gobierno de Pedro Sánchez «para luchar contra la España vaciada», que consideró «una de las grandes asignaturas pendientes que tenemos».

Margarita Robles defendió una «apuesta por la tecnología», la banda ancha en el medio rural, y un «firme compromiso por los autónomos» que en Ávila «forma parte muy importante del tejido industrial» y por las microempresas. Asimismo apostó por el diálogo social y por «realidades concretas», como el decreto de autoconsumo y la industrialización. «Queremos una Ávila pujante en España», concluyó Robles.

Gaspar Llamazares, por su parte, acompañó al candidato abulense de Actúa al Congreso, Alberto Novoa,y apostó por la diversificación industrial, aludiendo al caso de Nissan. Por otra parte, criticó el Gobierno «constituido como comité electoral» del PSOE, que «no ha hecho nada contra la corrupción», y aseguró que intentarán «movilizar al electorado de izquierdas» que quiere «seriedad» en política, asegurando que el «electorado de izquierdas está huérfano».

Llamazares también defendió la mayor esperanza de vida de la ciudadanía y pidió un pacto de estado «de verdad» ante la despoblación, pidiendo para Ávila «dar oportunidades a los territorios despoblados», aludiendo al peaje y a la comunicación ferroviaria, además de a los servicios públicos en la zona rural «equivalentes» a los de las zonas urbanas, así como la mejora de las comunicaciones en las redes.

Ya van cuatro los encuentros que los representantes de los trabajadores de las empresas auxiliares de Nissan han tenido con formaciones políticas en estos días: Podemos, Partido Popular, Por Ávila y Partido Socialista. El objetivo: buscar un «frente común» para clarificar y garantizar el futuro de los 150 trabajadores de las nueve empresas auxiliares a las cuales Nissan ya ha adelantado que, en mayor o menor medida, dejaría de contar con ellas a partir de septiembre.

A este número hay que añadir los 90 puestos de trabajo eventuales que desaparecerán en esta misma fecha en la propia planta de Nissan. Más el resto de los empleados de la planta, otros 450, que no saben qué pasará con ellos durante los próximos meses hasta que la planta concluya su reestructuración en abril de 2020.

El comité de empresa de Nissan se reunirá el martes 16 de abril con la dirección de la empresa, dentro de los encuentros mensuales que el director de la planta, Javier Novo, mantiene con los representantes de los trabajadores. Sin embargo, se trata de un encuentro en el que los empleados tienen expectativas de que se desvelen algunas de las líneas a trazar por la empresa para el denominado 'periodo valle' (septiembre 2019-abril 2020).

Por otra parte, el miércoles 17 se ha anunciado una reunión a tres bandas con la dirección de la empresa, representantes de las auxiliares y de la Junta de Castilla y León en el Ayuntamiento de Ávila.

A falta de lo que se determine en estos encuentros y de acudir el próximo día 22 de abril a la mediación en el SERLA, los trabajadores, tanto de Nissan como de las empresas auxiliares, han anunciado movilizaciones para los días 26 y 27 de abril para defender sus reivindicaciones.

Las reivindicaciones sindicales pasan por la creación de una mesa de trabajo con Nissan, los propios trabajadores y la Junta de Castilla y León para «amortiguar en lo posible la pérdida de puestos de trabajo» en el «periodo valle» de transformación de la planta de Nissan Ávila, entre septiembre de 2019 y abril de 2020, según explicó José Ramón Muñoz, secretario provincial de Metal de UGT-CICA, que recordó que el problema de Nissan «no se ha solucionado al cien por cien».

Los empleados también reclaman la creación de la bolsa de trabajo preferente para los empleados de las mismas una vez que tenga lugar la reconversión de Nissan, y «que la Junta se implique en la labor de formación» y de «adaptación» de estas empresas en sus funciones para el mantenimiento de las mismas. Estas medidas, que se acordaron hace un año cuando se negoció el plan industrial de Nissan, están recogidos en el convenio colectivo de la empresa, pero José Ramón Muñoz pide «que se concreten más estos puntos».