Blázquez reclama a Santa Teresa en «mundo que se encoge de hombros ante Dios»

El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez, ha reclamado a Santa Teresa de Jesús como «patrimonio espiritual de la humanidad», ya que «sus palabras están vivas» e interrogan a «un mundo que se encoge de hombros ante Dios», preguntando a cada individuo «cuál es su norte en la vida».

En su participación en la última jornada del Congreso Mundial 'Teresa de Jesús, Patrimonio de la Humanidad', que se ha celebrado en Ávila, el también arzobispo de Valladolid ha destacado la habilidad de la mística carmelita para moverse entre la «humildad» y la «valentía para hablar alto y claro».

En este sentido, ha subrayado el papel que jugó la santa de Ávila a la hora de denunciar la «discriminación de la mujer», enlazando esta reivindicación con las palabras del Papa Francisco al defender, según Blázquez, que «la presencia de la mujer en la Iglesia tiene que ser más intensa».

«Santa Teresa fue una mujer admirablemente libre», pero «desde un fundamento» espiritual, ha señalado el religioso nacido en Villanueva del Campillo (Ávila), quien advirtió de que la abulense no fue «una santurrona», sino «un gran personaje de la historia de la humanidad» que «nos enseña a vivir, también hoy», afirmó Blázquez en declaraciones recogidas por Efe.

En su opinión, estamos ante una figura que «es patrimonio espiritual de la humanidad como persona que ha tenido siempre en el centro a Dios; desde ahí Santa Teresa se va orientando a todas las cuestiones».

Todo esto hace que «el patrimonio espiritual de la iglesia se acreciente por medio de Teresa y, además, de una forma original», ya que se trata de una mujer que Blázquez define como un «genio».

Respecto al V Centenario del nacimiento de la santa que se celebra a lo largo de 2015, el cardenal ha afirmado que la Iglesia española lo ha vivido con mucha intensidad e incluso Blázquez reconoce que está «sorprendido porque las convocatorias, que son muy numerosas, han sido muy concurridas».

Carlos Osoro

En la última jornada del congreso, organizado por el Centro Internacional Teresiano Sanjuanista (CITeS), también ha intervenido el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, quien ha defendido que el momento actual y los tiempos de Santa Teresa coinciden en que ambos suponen el inicio de «una época nueva».

«En toda etapa histórica nueva encontramos siempre algo esencial: tiene que estar marcada por la alegría», ha dicho el también vicepresidente de la CEE, Carlos Osoro, para después agradecer al Papa Francisco sus esfuerzos por dar a conocer «la alegría de la fe».

«El corazón místico de esta época nueva, como la fue en tiempos de Santa Teresa de Jesús, tiene que estar centrado siempre en la alegría de evangelizar», ha defendido Osoro.

El religioso cántabro ha subrayado que Santa Teresa encontró «la verdad y la alegría» en Dios y que, al igual que ella «no huyó de su realidad social concreta», es necesario que los católicos salgan «a encontrare con los demás» y transmitir el mensaje del evangelio.

Agustí Borrel

En el acto de clausura, el vicario general de la Orden del Carmelo Descalzo, Agustí Borrel, ha afirmado que el balance del congreso internacional, celebrado en Ávila desde el lunes, es «extraordinariamente positivo». «Hemos comprobado que el mensaje de Santa Teresa es hoy más actual y universal que nunca», remachó Borrel.

«Una de las riquezas de este congreso ha sido la variedad de temas y de personas, pues los ponentes venían de todos los ámbitos sociales, culturales y políticos, y de todos los continentes, poniendo de relieve que Teresa de Jesús, que es una monja contemplativa, tiene una palabra muy significativa para todos», ha añadido Borrel.

Francisco Javier Sancho

En la misma línea, el director del CITeS, Francisco Javier Sancho, ha asegurado que durante estos siete días se han superado las mejores expectativas debido a «las reflexiones profundas que han ido emergiendo desde todos los ámbitos».

De hecho, se ha mostrado sorprendido al ver que «Santa Teresa toca los corazones y sensibilidades de personajes que se declaran incluso agnósticos» -por ejemplo, el secretario general de UGT, Cándido Méndez-, lo que convierte su figura en «un punto de encuentro y diálogo en el deseo de todos de hacer que nuestra sociedad sea cada vez mejor».