Brazo de San Lorenzo

Han pasado 18 años desde que don Mariano Rodríguez, en honor a San Lorenzo, creara este postre. La elaboración del Brazo de San Lorenzo se ubica en Osorno, pueblo palentino que está situado a 50 km. de la capital, en dirección noreste. La elaboración artesanal, aceptación y consumo le han convertido en un dulce de gran tradición con identidad propia.

Ingredientes para la yema tostada: 700 gr. de azúcar, 3 dl. de agua, 30 gr. de maicena, 10 huevos y 8 yemas.

Elaboración: acercar un cazo a fuego medio con el agua y el azúcar, hervir por espacio de 5 minutos. Reservar. En otro recipiente mezclar los huevos con las yemas y la maicena, sin batir mucho. Cuando el almíbar tenga el punto deseado se vierte sobre los huevos y se mezcla con la varilla. A continuación, se pasa por el chino (colador) al mismo recipiente donde se ha cocido al almíbar. Llevar el cazo nuevamente a cocción a fuego suave, removiendo con una espátula de madera. Finalmente, volcar el contenido en una placa para enfriar. Una vez tibio, se recubre el brazo.

Ingredientes para el Brazo de San Lorenzo: 150 gr. de harina floja de panadería, 150 gr. de azúcar, 3 huevos, sal, 1 cucharada de levadura, nata montada, yema tostada, azúcar glass, mantequilla para la placa.

Elaboración final: precalentar el horno en la parte baja a 180ºC. Montar las claras a punto de nieve, añadiéndole un pellizco de sal. En otro recipiente se montan las yemas con el azúcar hasta dejarlas esponjosas y blanquecina; al instante mezclar las claras y las yemas. Seguidamente, se van incorporando cucharada a cucharada la mezclada de harina y levadura, hasta que lo absorba por completo. Reservar. En una placa de horno colocar un papel parafinado untado de mantequilla. A continuación, se vierte la crema, extendiéndose de forma uniforme. Introducir al horno 25 minutos.

Humedecer un paño de cocina y extender; al instante vuelque la plancha de bizcocho. Quite el papel y extienda la nata; al instante enrolle el brazo ayudándonos con el paño. Una vez bien formado se deja cubierto con papel film hasta enfriar. Se cubre de yema tostada y se le hacen las marcas típicas de la parrilla. Para terminar, se espolvorea el azúcar glass.