«La droga era de mamá pero no quería decir que mamá la usaba por los dolores»
En su declaración ante el juez, Triana vuelve a dejar ver la estrecha relación con su madre pero también a una persona indefensa, en su testimonio roza la niñez, quizá por estrategia de la defensa
a.cubillas/leonoticias
Miércoles, 30 de septiembre 2015, 18:43
«Estaban en la habitación de mamá pero no quería decir que mamá lo tomaba porque le dolía la espalada». Eran las primeras palabras de Triana Martínez, hija de la asesina confesa de Isabel Carrasco, en la causa abierta contra ella y su madre contra un supuesto delito de tráfico de drogas.
Unas palabras que evidenciaban el elevado grado de unión con su madre. Siempre se ha dejado ver los estrechos vínculos que les unen a las dos. En la calle, acudían juntas a los locales de copas y a los actos sociales de la ciudad, desayunaban, comían y cenaban mirándose a los ojos.
En la prisión no han sido pocos los que han confirmado cómo Triana bajaba cada noche su colchón de la litera para dormir junto a su madre, como van juntas a misa una vez a la semana aunque en su día a día se han vuelto más sociales aunque sin excesos.
Sin embargo, esta declaración deja ver algo más que esa estrecha relación entre madre e hija. En el banquillo del Juzgado de lo Penal nº2 de León este miércoles era una mujer de 36 años la que se sentaba acusada por un delito de tráfico de drogas.
Lenguaje aniñado
Sin embargo, ante el micrófono esa mujer parecía convertirse en una niña o una adolescente, que rozaba la indefensión y que parecía estar ajena de lo que allí estaba ocurriendo. Puede que fuese parte de la estrategia de la defensa, puede que no, pero Triana ha realizado una declaración más propia de una niña.
Es más, en todo momento se ha referido a Montserrat como mamá. «Las plantas eran de mamá no mías. mamá tenía muchos dolores de espalada, le dolía mucho por eso empezó a consumir. Fue una amiga la que se lo dijo a mamá y luego empezó a plantar porque se animó».
Un testimonio, el primero en presencia de los periodistas, que dibuja un poco más la personalidad de esta joven que junto con su madre está detrás del crimen más mediático de la provincia de León, por el que serán juzgadas el próximo año en un juicio que se prolongará durante un mes.