Zamora

Toro lidera un proyecto europeo para hacer accesible su bodega histórica

El objetivo es hacer accesible para las personas con discapacidad física, sensorial o con ambas el edificio, que cuenta con algunas barreras arquitectónicas por su construcción, y el pequeño centro de interpretación del vino de Toro que alberga en su interior este edificio en pleno casco histórico de la localidad, que ya existía en el siglo XVII y cuya gestión está a cargo del Consejo Regulador de la Denominación de Origen del vino de Toro.

La bodega no será accesible como tal físicamente, pero la pretensión es que sí lo sea de una forma innovadora. Para ello, se están digitalizando sus diferentes espacios a través de un escaneado 3D y con el uso de textos locutados y subtítulos, cualquier persona podrá hacer la visita a la bodega de manera virtual y conocer el patrimonio histórico, vinícola y cultural que alberga.

De esta manera, la Ruta del Vino se compromete no sólo con el patrimonio de la comarca de Toro vinculado al enoturismo, sino también con el doble objetivo de fomentar el disfrute de la cultura relacionada con el turismo del vino entre las personas con discapacidad.

Además, la gerente de la Ruta del Vino de Toro, Judith Fernández, ha confirmado que la entidad está trabajando de este modo en la elaboración de un proyecto piloto que, a partir del escaneo de la Bodega Histórica toresana, pueda ser aplicable también a otras bodegas subterráneas enmarcadas dentro del territorio de la D. O. Toro, y otros, para hacerlas así accesibles y susceptibles de disfrute para todas las personas y sus diferentes capacidades. La previsión es que el trabajo esté finalizado a lo largo del año 2024.

La Ruta del Vino de Toro lidera a nivel europeo mediante esta innovadora acción el proyecto HeritAccess – acceso a la cultura y al patrimonio en entornos rurales a través de la experiencia digital interactiva-, cuyo objetivo es «democratizar el acceso a la cultura y el patrimonio ubicado en el medio rural», según han confirmado responsables de la iniciativa.

Es un proyecto que la entidad toresana coordina en colaboración con el Centro de Innovación Educativa Formative Footprint y en el que participan socios de otros cinco países (Serbia, Eslovenia, Italia, Grecia y Alemania).

El proyecto apuesta por un enoturismo «accesible e inclusivo» que sirva para mejorar la experiencia de las personas con discapacidad en el entorno cultural. Se trata de aprovechar el patrimonio de las zonas rurales en las que predomina el enoturismo, como es el caso de la región vitivinícola de Toro, adaptando sus instalaciones a las personas con discapacidad motora o sensorial, de manera que los visitantes con movilidad reducida u otras capacidades cognitivas también puedan disfrutar de los recorridos turísticos.

Además de reconstruir, a través de tecnología 3D, lugares seleccionados por su valor histórico, como la bodega toresana, así como tradiciones que «merecen ser transmitidas» a los visitantes con discapacidad motora, visual, auditiva o cognitiva, enmarcado en el proyecto HeritAccess, se prevé también elaborar una base de datos del patrimonio rural, tanto público como privado, abierto al público en el que se concentren tradiciones o leyendas.