El PP de Valladolid celebrará el congreso del relevo de Carnero el 6 de marzo

El diputado y alcalde de Villalón de Campos, José Ángel Alonso, es persona de total confianza del equipo de Pablo Casado, y en esa esfera de influencia se sitúan también los parlamentarios Mercedes Cantalapiedra y Eduardo Carazo. A ellos se suma Pilar del Olmo, al frente de la oposición municipal de Valladolid, que se ha acercado a Íscar desde esta responsabilidad. Una candidatura de integración deberá contar con la bendición de Génova.

La Junta Directiva Provincial ha convocado esta tarde noche del 25 de enero oficialmente el congreso que, bajo el lema 'Activemos Valladolid', se celebrará el 6 de marzo con votación telemática ante la situación de pandemia, aunque la Comisión Organizadora puede optar por una fórmula mixta que conjugue el voto presencial con el digital. Al frente de la organización del congreso popular estará Rodrigo Nieto, concejal en el Ayuntamiento de Valladolid y jefe de gabinete de Conrado Íscar en la Diputación.

Los contactos que se desarrollan en estos momentos intentan evitar que haya más de un candidato, como ocurrió en 2017, con Borja García Carvajal (hoy gerente del PP de Castilla y León y del de Valladolid) plantando cara a Jesús Julio Carnero y logrando más de un 40% de los votos.

De aquel congreso salió un PP agrietado internamente, al que los resultados de 2019 no han ayudado a cohesionar: perdió escaños en Congreso y Senado, sufrió un varapalo en las autonómicas, siguió en la oposición en Valladolid y mantuvo la Diputación, pero sin mayoría absoluta.

En el PP de Valladolid coexisten en estos momentos tres sensibilidades diferenciadas que han ido evolucionando de posición tras las primarias regionales que enfrentaron a Antonio Silván y a Alfonso Fernández Mañueco y las nacionales que ganó Pablo Casado. Está el grupo que apoyó a Jesús Julio Carnero, los que refrendaron a Borja García, y un tercero que serían los que habrían quedado descolgados de estas corrientes.

El primero lo encabeza Conrado Íscar que ha ganado peso territorial desde la Presidencia de la Diputación y ha modulado su relación con Teodoro García Egea, tras el conflicto generado por el veto de Génova a Jesús Julio Carnero. El grupo de Carnero se posicionó con Silván y frente a Mañueco y con Soraya Sáenz de Santamaría y frente a Casado.

El sector 'borjista' apoyó a Mañueco en las primarias regionales y Mañueco a ellos en las provinciales que ganó Carnero y es casadista al 100%, tanto que está alineado con Génova en el conflicto suscitado por la contratación del exgerente autonómico, Pedro Viñarás, como asesor del grupo de las Cortes tras haber sido indemnizado por el partido. Luego está un tercer grupo, que tiene su núcleo en el Ayuntamiento de Valladolid y que apoyaron a Silván en las primarias regionales; a Jesús Julio en las provinciales y que mantienen más conexión con Génova que con Fernández Mañueco.

Ese puzle es el que debe encajar una candidatura de integración, que consideran clave en estos momentos para intentar ofrecer confianza a los afiliados y simpatizantes, incluso cargos, que pusieron su vista en Cs y Vox y que ahora pueden volver a las filas del PP.

«Han anunciado un candidato de consenso y hoy no lo hay», aseguró ayer Miguel Ángel Oliveira, alcalde de Tordesillas. El regidor avanzó que tiene los apoyos necesarios para presentarse a las primarias si esa lista que garantice la unidad interna no se da. «Este es un partido democrático y deciden los afiliados», apuntó.