El toro gigante que Vox quiere para Burgos: como cuatro edificios Duque de Lerma uno encima del otro
El astado de 300 metros que los de Abascal pretenden instalar en la capital burgalesa supera en 213 metros la altura del edificio al otro lado del Puente Mayor y en 225 a la Catedral de Valladolid
Tendrían que montar la Estatua de la Unidad, de 182 metros, en la India, que representa a la divinidad Sardar Vallabhbhai Patel sobre la estatua china conocida como Spring Temple Buddha, de 128 metros, en China, en honor de Buda Vairocana para que alguna de las esculturas actuales estuviera a la altura del toro de 300 metros por el que aspiran varias ciudades españolas a la que se une la propuesta de Vox en Burgos.
El toro es un proyecto para construir una colosal escultura metálica en forma de toro bravo que se propone como un nuevo gran icono turístico de España. La iniciativa es promovida por la Academia Española de Tauromaquia, que se ofrece a correr con la inversión y que busca un municipio para instalar esta obra monumental que mediría 300 metros, aproximadamente tres veces la altura de la catedral de Burgos (112 metros). Se plantea que la escultura incluya miradores panorámicos en sus cuernos y un área de ocio con restaurantes y tiendas relacionadas con la tauromaquia en su base.
El objetivo es que esta escultura funcione como un símbolo nacional de España, similar al impacto turístico que tienen monumentos como la Torre Eiffel en París o la Estatua de la Libertad en Nueva York. El proyecto se financiaría mediante inversión privada, sin coste para las arcas públicas, y solo requiere que un municipio ceda un terreno suficientemente grande (al menos unos 650 metros de largo). Ciudades como Ciudad Rodrigo, Toro, Benavente, Burgos y otras han mostrado interés en albergar este monumento, que Madrid ha rechazado.
Pero ¿y cómo le sentaría a Valladolid tremendo morlaco? Pues aunque aquí no se ha planteado candidatura, soñar es fácil. Aunque en este caso, también puede provocar pesadillas. Con independencia de decidir cuál sería el mejor emplazamiento, el torito sería casi cuatro veces más alto que el edificio que representa el techo de la ciudad, el Duque de Lerma, que mide 87 metros de altura y cuenta con 23 plantas, el bloque residencial que fue durante mucho tiempo el más alto de Castilla y León hasta que en 2009 se construyó la Torre de la Rosaleda en Ponferrada.
Por debajo quedarían la Catedral, cuya la torre alcanza entre 70 y 75 metros, aunque la cifra de 70 metros corresponde al mirador y 75 a la altura máxima estructural tradicional. Sin embargo, otras fuentes elevan la cifra hasta los 84 metros, si se considera la estatua del Sagrado Corazón que culmina la torre.
La torre de la Antigua mide aproximadamente entre los 50 y los 55 metros de altura si se incluye la aguja rematada en teja cerámica. Más abajo queda el estadio José Zorrilla y no precisamente por el descenso a Segunda. Su altura del estadio no es tan mencionada como su capacidad (27,618 espectadores), pero en su mayor punto (tribuna principal, cubierta incluida) se estima en torno a los 20-23 metros.
Para los amantes de la estadísticas y los más entregados al proyecto, la envergadura total de los cuernos, de punta a punta, rozaría los 280 metros, en cuanto a la altura de las patas, la altura a la cruz (donde comienzan las patas delanteras) serían 180 metros aproximadamente. En caso de que un torero estuviera a su altura y le sacara faena, iba a necesitar carretilla y la ayuda de la cuadrilla. El apéndice tendría 40 metros de largo.
Y venga, va. Para los que disfrutan con la casquería, habría banquete de criadillas. El tamaño de los testículos del toro que si se enamora de la Luna casi la roza sería de treinta metros por testículo, como un globo aerostático para 25 personas.