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Rafa Vega 'Sansón', durante la charla con el director del periódico y un grupo de suscriptores de El Norte de Castilla digital. Ramón Gómez
Sansón a un grupo de suscriptores de on+: «Todos los días no puedes ser genial»

Sansón a un grupo de suscriptores de on+: «Todos los días no puedes ser genial»

Rafa Vega y Ángel Ortiz, director de El Norte de Castilla, charlan sobre el proceso creativo del viñetista, el día a día del periódico digital y los límites del humor gráfico

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Jueves, 26 de mayo 2022

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Acompañado por su primo (porque él no conducía) y con el sueño de publicar sus viñetas en el periódico de toda su vida, un joven Rafa Vega entraba en la sede de El Norte de Castilla con una ilusión materializada en un currículum que no pudo entregar al director ese día (Carlos Roldán por aquel entonces) porque se encontraba de vacaciones. Era agosto de 1995 y, tras insistir unas semanas después, consiguió una entrevista en el periódico que terminó con un «empiezas el lunes». Veintisiete años después, y con miles de viñetas publicadas bajo el pseudónimo de Sansón, Rafa Vega ha regresado a la hemeroteca del diario para charlar con Ángel Ortiz, director del periódico, sobre su día a día, los límites del humor gráfico y los entresijos del proceso creativo.

Con un café como excusa, atendió a las cuestiones de un grupo de suscriptores de on+, que se interesaron sobre todo por el origen de su inspiración, sus viñetas favoritas, cómo elige a sus personajes o sus gustos dentro del mundo del humor gráfico. «Todavía no me considero un dibujante -se sinceró-, el dibujo es un recurso para hacer bocadillos». Y explicó que primero elabora un guion: «hasta que 'aboceto' las viñeta lo que hago es escribirlas». Luego, dependiendo de la idea, decide ir «bajando y subiendo» el listón del dibujo, añadiendo o eliminando detalles. «Aprendí casi desde el primer año que todos los días no puedes ser genial. Eso sí, al final siempre sale. Ya forma parte de mi vida, de mi día a día», relató.

Ortiz y Vega con el grupo de suscriptores en la hemeroteca y durante el café. En la última imagen, el humorista gráfico posa con Daniel Moreno, al que retrató en solo cuatro minutos. R. G./ L. M. C.
Imagen principal - Ortiz y Vega con el grupo de suscriptores en la hemeroteca y durante el café. En la última imagen, el humorista gráfico posa con Daniel Moreno, al que retrató en solo cuatro minutos.
Imagen secundaria 1 - Ortiz y Vega con el grupo de suscriptores en la hemeroteca y durante el café. En la última imagen, el humorista gráfico posa con Daniel Moreno, al que retrató en solo cuatro minutos.
Imagen secundaria 2 - Ortiz y Vega con el grupo de suscriptores en la hemeroteca y durante el café. En la última imagen, el humorista gráfico posa con Daniel Moreno, al que retrató en solo cuatro minutos.

Y como explicó el director, la viñeta de Sansón también forma parte del día a día de la página web. De hecho, se trata de uno de los contenidos que cada día prefieren los suscriptores del periódico digital: siempre en el 'top ten' de lo más leído. Tal vez la razón la encontremos en el hecho de que Vega siempre va más allá, «se nos pide dar todos los días la opinión y sí, es un privilegio, pero también es suicida. Por suerte periódicos como El Norte cuentan con un lector inteligente, sabe que eres honesto. Le criticas, le metes el dedo en el ojo y ahí sigue. Porque sabe que intentar ser neutral es un fraude».

Con esa honestidad contestó cuando una suscriptora le preguntó si alguna vez le habían devuelto algún trabajo: «pues diré que sí -afirmó sin dudarlo-, pero creo que eso es positivo. El hecho de cruzar los límites es muy bueno, pero los medios tienen sus propietarios y sus intereses, Hay que entenderlo, pero yo cuando veo que hay un límite tiendo a acercarme, para tocar las narices. Pero jamás me han dirigido una viñeta».

Casi dos horas más tarde, sin ya preguntas en el tintero y tras una sugerencia que Rafa acogió con una risa nerviosa -ni más ni menos que publicar en la web dos viñetas al día-, un joven estudiante de Periodismo no dudó en reclamar al humorista un retrato. Cuatro minutos bastaron para demostrar que tal vez todos los días no se consiga ser genial, pero sí un genio.

Vídeo. Rafa Vega dibuja el retrato de un suscriptor en un tiempo récord. Rodrigo Ucero

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