Traspinedo se zambulle en sus fiestas esperando respuestas sobre la muerte de Esther López

La recuperación del calendario de festejos es, en este contexto, «una sensación agridulce», indicaban desde el entorno de las amistades de la familia de la joven, que desapareció el 13 de enero y cuyo cuerpo fue encontrado en la cuneta de la carretera de acceso al municipio el 5 de febrero sin que las investigaciones llevadas a cabo hasta la fecha por la Guardia Civil hayan servido para explicar qué le ocurrió.

La farmacéutica, Marina Carrera Domínguez, ha sido la encargada de pronunciar el primer pregón de las fiestas de Santa Isabel postpandemia y visibilizar así el reconocimiento al esfuerzo del colectivo sanitario y a la unión de todos los vecinos, que han arrimado el hombro para hacer menos cuesta arriba la crisis sanitaria en el municipio. «Quiero agradecer vuestro apoyo, por prestarnos vuestra ayuda desinteresada, buscando guantes donde no los había, fabricando mascarillas para que pudiéramos estar un poco más seguras en nuestro día a día, desinfectando cada rincón y dedicándonos palabras preciosas que nos emocionaban y nos daban fuerzas para seguir adelante», ha recordado Marina Carrera, que destacó la palabra «unión» en los «dos años en los que la vida nos cambió». Estuvo acompañada en el balcón del Ayuntamiento por las copregoneras Mari Carmen Rodríguez y Sole Muñoz, además de por el alcalde, Javier Fernández y la teniente de alcalde, Angara García.

En su alocución emocionada de homenaje a los héroes de la pandemia, civiles y militares, la pregonera tuvo palabras de recuerdo «entrañable» para «los que ya no están» y «muy especialmente, a nuestra vecina Esther. ¡Esther, tu sonrisa nos iluminará para siempre!», dijo, en medio de un cerrado aplauso.

Alguno de los vecinos, en ese momento, al recordar a sus seres queridos, fallecidos durante la pandemia y la muerte en extrañas circunstancias de Esther, tenía los ojos empañados.

«¿Hay ganas de fiesta?», preguntó por tres veces el alcalde a los vecinos, que le respondieron un sí muy animados al inicio de acto, especialmente la gente más joven, que enseguida empezó a calentar motores al ritmo de la charanga. Fernández dedicó unas pocas palabras a destacar «el comportamiento ejemplar» y la unión del pueblo «en momentos tan difíciles que nos están tocando vivir». Es tiempo ahora, subrayó, de «hacer un paréntesis, porque nos merecemos vivir y disfrutar estas fiestas de manera vibrante y feliz». Férnández estuvo arropado por otros alcaldes y concejales de la zona, como Tudela de Duero, Sardón, Quintanilla de Onésimo, Santibáñez de Valcorba y Olivares de Duero, así como por autoridades provinciales.

«El pregón desde el balcón del Ayuntamiento se ha vivido con mucha emoción, pues son dos años sin fiestas, y la gente estaba deseando. Y también por todas las circunstancias que han acontecido, la gente lo retoma con mucha más fuerza», ha señalado el regidor al término del acto. Hay ganas de volver a la normalidad en Traspinedo, aunque la sombra de Esther López es alargada.