Valladolid
El helicóptero antiincendios de Quintanilla «no está operativo», lo que pone en «riesgo la seguridad»El Sindicato Libre de Trabajadores denuncia que las bases de Riaza y Villaralbo también «carecen» de las aeronaves «asignadas» y piden a la Junta una «explicación inmediata»
«Es una grave deficiencia que pone en riesgo la seguridad ciudadana y la protección del valioso patrimonio natural de la comunidad», lamentan de antemano ... desde el Sindicato Libre de Trabajadores Aéreos (SLTA), sobre la «carencia de helicópteros asignados» en tres bases de extinción de fuegos de Castilla y León pese a que la campaña de alto riesgo comenzó el 12 de junio.
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En concreto, se trata de las aeronaves antiincendios de Quintanilla de Onésimo (Valladolid), Villaralbo (Zamora) y Soria, si bien en este último caso -siempre según este sindicato, que aglutina a profesionales del sector aéreo- «opera temporalmente» un helicóptero bombardero desplazado desde la localidad zamorana de Rosinos y en el municipio soriano de Garray se encuentra el asignado a Riaza. «Esta reubicación no soluciona la carencia estructural de medios aéreos», apuntan.
Una situación en la que -critican- predomina el silencio institucional y que «compomete gravemente la capacidad de respuesta ante emergencias, poniendo en peligro a la población, al personal del operativo y al entorno natural de Castilla y León, la región con la mayor masa forestal de España». «La Junta no ha ofrecido explicaciones públicas ni plazos claros para la incorporación de estos recursos vitales, es inadmisible», subrayan fuentes del Sindicato Libre de Trabajadores Aéreos.
«Falta de pilotos españoles»
Por todo ello, instan al Ejecutivo autonómico a dar una «explicación inmediata y transparente sobre la ausencia de los tres helicópteros», así como a activar de manera «urgente todos los medios comprometidos» para la presente campaña de incendios.
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Una de las «principales causas» de esta situación es «la falta de pilotos españoles derivada de las condiciones laborales precarias del sector». «Los profesionales acumulan una pérdida de poder adquisitivo superior al 25% y dificultades para conciliar vida laboral y personal», insisten estas mismas fuentes, que reiteran que todo ello «obliga a las empresas a recurrir a pilotos extranjeros, lo que perjudica la economía nacional y precariza aún más el sector».
Asimismo, el sindicato critica que la Junta «permita estas prácticas, que podrían estar detrás de la falta de medios operativos». ««No podemos permitir que la desidia negligente de la administración derive en consecuencias irreparables. La seguridad de la comunidad y la protección de nuestro medio ambiente no pueden esperar», concluye el Sindicato Libre de Trabajadores Aéreos. Este medio ha contactado con la Junta de Castilla y León para conocer su versión sobre esta situación, si bien no ha obtenido respuesta.
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