El colegio de Esguevillas intenta 'fichar' a cuatro alumnos para no perder una maestra

Como cada año, en breve se abren los plazos para la matrícula del curso que viene y, como cada año, de nuevo a algunos centros educativos del medio rural se les abren dos frentes para evitar la pérdida de alumnos. Uno de esos frentes es la despoblación y el otro es la fuga de matrículas a otros centros, en colegios de pueblos más grandes o de la capital. Ambas circunstancias convergen en la pérdida de alumnos y lo que esto conlleva: disminución de profesores o aulas.  

Uno de esos centros que cada año se ve haciendo equilibrios en esa cuerda floja es el CRA Esgueva –en Esguevillas de Esgueva-, en el que cursan 46 niños de los ocho pueblos que abarca su área educativa, niños y niños con edades comprendidas entre los 3 años y los 12 años, completando así el ciclo de Educación Infantil y Primaria.  «Con los 46 estamos en el límite de que nos puedan suprimir una profesora y nos quedemos con menos recursos», explica la directora del CRA, Sole Fernández, quien señala que «se marchan siete niños, los que finalizan Primaria y se van al Instituto a hacer Secundaria, y de momento solo van a entrar tres niños nuevos, por lo que nos quedaríamos en cuarenta y dos alumnos. Necesitamos esos cuatro más sí o sí». 

Como señala la directora, «sabemos que hay niños en el entorno del valle que nos corresponden a nosotros como colegio y los padres los están mandando a Renedo o a Valladolid, por distintas razones: porque los padres trabajan allí, por horarios, porque consideran que es mejor la educación de la ciudad..., no sé, varios factores. Yo creo que gran parte es también por desconocimiento».  

Ese desconocimiento es el que quieren evitar mostrando a los padres el trabajo que hacen en el CRA, explicándoles el método lectivo que ponen en práctica y también explicándoles las posibilidades de conciliación que les ofrece el centro, posibilidades ampliadas ahora con el servicio de madrugadores y a través de las actividades extraescolares que desarrollan por la tarde, entre otras propuestas, a las que se suma el propio Ayuntamiento de la localidad. «Además de ofrecer una educación de calidad, igual o mejor a la de colegios de la ciudad, también ofrecemos posibilidades para conciliar», afirma la directora.   

«Ahora ya tenemos el servicio de madrugadores, desde la 7:30 horas, con lo cual ya cubrimos una franja que se amplía, pues antes entraban a las 9:30 horas. Tenemos extraescolares hasta las cinco de la tarde, por lo que los niños se pueden quedar en una jornada de nueve a cinco; pero, además, el Ayuntamiento ha ofertado actividades de cinco a seis la tarde, por lo que ahora hay un montón de cosas, creo que tenemos una oferta estupenda, y creo que hay mucho desconocimiento de lo que se está haciendo en el colegio». «Y luego está el transporte y el servicio de comedor gratuito para los niños de fuera del pueblo».  

Por todo ello, insiste en que más que nada lo que queremos es que los padres vengan a conocernos», los anima a que soliciten una cita y atenderles personalmente. Además, les invitan a que se pasen también por sus perfiles de redes sociales de Facebook, Twitter e Instagram, o por su página web, para que vean su día a día y comprueben el trabajo que realizan con los niños.

 

 

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