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José Miguel Prieto -Josemi para los amigos- «era uno de esos montañeros de raza, pero no solo montañero, también un gran escalador, tenía 7b o ... 7c», recuerda un compañero del Rocódromo de Las Norias, que compartió precisamente vía el pasado miércoles con él.
El veterano deportista de Valladolid, de 67 años, y que ha perdido la vida este jueves en el Parque Nacional de los Picos de Europa, «era un vitalista y una gran persona», valoran desde su club el Grupo de Montaña Picos, uno de esos clubes de toda la vida de la provincia, y del que José Miguel Prieto era miembro.
«Estamos todos en shock, anda que no hay gente por ahí que se podía marchar antes, pero Miguel... Que siempre tenía una palabra para levantarte el ánimo... '¡Qué no eres malo! ¡Qué eres un máquina!'», detalla Israel Martínez, de Geko Aventura, donde últimamente había dejado de escalar porque prefería las vías de Las Norias, «porque le dolía la espalda».
Sus amigos, sus compañeros de vías en Valladolid aún no se lo creen. «Sabemos lo que ha publicado la prensa, porque hemos intentado hablar con Jose, el compañero con el que iba y de 52 años, pero está tocadísimo», agregan desde Las Norias, donde no quieren imaginarse lo que José, su compañero, está padeciendo al ver como José Miguel se despeñaba por una altura de 80 metros. «Es la montaña, y lo asumimos, puedes también morir de un infarto, pero jobar, queremos saber mejor qué ha pasado», agrega Israel Martínez que asegura que la noticia de su muerte «ha sobrecogido» a todo el sector en la tarde de este jueves, que aseguran que la familia está «tocadísima», tanto la mujer, como el hijo y la hija del fallecido.
El suceso ha ocurrido a las 12:00 horas de este jueves, cuando el 112 ha recibido la llamada del acompañante de José Miguel informando de que el montañero vallisoletano se había precipitado al vacío desde una altura de 80 metros y que no se movía. Los dos veteranos deportistas descendían por la cara norte del Pico San Carlos, en el entorno del macizo de Ándara, en Picos de Europa.
Una vez confirmado el fallecimiento por el médico, el cadáver ha quedado custodiado por el GREIM de la Guardia Civil y el acompañante, que ha visto como su compañero se precipitaba, ha sido rescatado, muy conmocionado por lo sucedido, por el helicópero de Protección Civil del Gobierno de Cantabria. Una vez que fue bajado de la aeronave en la base de Tama fue atendido por Bomberos del Gobierno Autonómico y trasladado al Centro de Salud de Potes. Por su parte, el cuerpo de José Miguel fue trasladado en el helicóptero del GREIM de Potes.
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