«Yo me lo guiso, yo me lo como»

Unas manos prodigiosas, talento, una guitarra e Internet. Son los ingredientes con los que Miguel Rivera ha elaborado el éxito. Este zaragozano de 34 años revolucionó hace dos meses YouTube con una versión de la canción de Michael Jackson, Beat it. Pero no es una simple versión, intentó ir más allá, ser creativo, que la gente lo entendiera y valorara, ¿lo ha conseguido? El vídeo supera hasta la fecha los tres millones de visualizaciones, ha sido reconocido por medios estadounidenses como la revista Guitar World y requerido personalmente por nuestro alcalde para tocar en las fiestas. Puede que lo haya logrado.

¿Cómo se define tu estilo musical?

Es guitarra acústica percusiva, que significa tocar armonía, melodía más percusión. Con la música instrumental tienes más libertad. La gente decía de Hope (un tema suyo propio) que sonaba a todo y a nada a la vez, no me decían un artista de referencia y eso es todo un logro. Pero sí es verdad que tiene toques españoles, aires moriscos y musulmanes; eso es lo que puedo aportar a la guitarra percusiva que no aportan los anglosajones, que soy español.

¿Cuál era el reto de Beat it?

Conseguir que la percusión se mantenga durante toda la canción sin excepciones y que la melodía y el riff (frase musical que se repite a lo largo de la pieza) permanezcan sin modificaciones. En definitiva, dos líneas melódicas sonando a la vez yo solo; yo me lo guiso, yo me lo como.

¿Cuáles fueron las reacciones al vídeo?

Un alumno mío subió el vídeo a Reddit, la quinta página web más vista de Internet. En ella, cada post lo puntúa la gente y el mío en poco tiempo acabó en el primer puesto, como el mejor puntuado. El vídeo se viralizó, conseguir eso es muy complicado y no existe una fórmula concreta para lograrlo. También lo publicaron en la web de la revista Guitar World, cuando me enteré me eché a llorar. Lo que sentí en ese momento debe de ser parecido a lo que sintió Almodóvar cuando le dieron el Oscar. No me podía imaginar que alguien de EE UU dijera que había hecho una obra maestra. A partir de ahí el vídeo pasó por más países, salió en la televisión argentina y desde la publicación se han duplicado los seguidores en mi canal de YouTube. Un boom mediático.

¿En qué ha cambiado tu situación profesional?

Ha cambiado en popularidad, en lo profesional salvo cuatro actuaciones puntuales que hay ahora mismo, no lo he notado mucho.

El alcalde de Valladolid le ha requerido personalmente, ¿qué supone para tí?

Me siento un privilegiado. Es como una de esas cosas que nunca te imaginas que van a pasar y cuando pasan te hace una especial ilusión, porque no estaban dentro de las posibilidades.

¿Qué esperas del público pucelano?

Que disfruten. Espero que vean que es algo raro, diferente, que no es muy conocido aquí en España pero quiero que les guste y transmitirles lo que yo siento cuando toco.

¿Qué tiene entre manos?

Llevo todo el mes trabajando en una nueva 'cover' de Queen, no voy a decir el título para que haya expectación (risas), que es más reto todavía que Beat it.

¿Cuáles son sus proyectos a largo plazo?

Mi idea es trabajar este año que viene en sacar un disco y cuando lo tenga intentar tocar en todas las partes que pueda y que me salga rentable, porque tengo que seguir manteniendo a mi familia.

Trabajas dando clases particulares de guitarra, ¿lo dejarías por la música?

No creo que las deje nunca, siempre puedo tener tiempo para darle una clase a alguien. Es una parte humana fundamental para darte cuenta de quién eres, como músico creces un montón. Es fundamental porque tienes que comunicar lo que sabes.

¿Cuándo te diste cuenta de que lo tuyo era la música?

Lo sabía desde los catorce años, pero con mi primer grupo, Yod, yo consideraba que había hecho un trabajo muy bueno y no había conseguido nada. La sensación que tenía era de que no importaba lo que hiciera porque no iba a tener éxito, hasta que me desembaracé del éxito.

¿Internet perjudica o beneficia a los músicos?

En el momento en el que el propio artista sube su contenido a Internet, como va directamente al consumidor, es la gente la que elige lo que escuchar, no hay ningún tipo de filtro y eso siempre es bueno para el artista y para la creatividad. La parte negativa es que al tener acceso a toda la música pues la gente no compra discos, entonces no tienes ingresos, pero lo que hay que hacer es buscarlos en otro sitio, como en conciertos o dando clase.

¿Qué piensa de las SGAE (Sociedad General de Autores y Editores)?

Tienen luces y sombras. Son exactamente como el gobierno, lo puedes criticar todo lo que quieras, pero es necesario, no se puede estar sin gobierno. Pues las SGAE es lo mismo, lo que hay que intentar es que funcione lo mejor que se pueda, que sea lo más transparente posible y que los socios puedan botar y elegir a la gente que lo controla y que esté al servicio del autor, que no siempre lo han estado.

¿Cuál sería su escenario perfecto?

El Madison Square Garden, pero es imposible. Una vez, hablábamos mi primo y yo de Nueva York y él me habló del Madison, entonces me acordé del concierto de Led Zeppelin que para mí es brutal, en ese mismo escenario, no sé si en 1973 o en 1974 y entonces no sé por qué me vino eso a la mente.

¿Un deseo ambicioso?

Me gustaría hacer una buena gira por España y que la gente me conozca y me venga a ver. Después de España que es mi país, la haría por Inglaterra y EE UU que es la cuna de la música popular y encima me han tratado de una manera que no me podía imaginar.

Michael Jackson es uno de sus referentes. ¿Cuál más tiene?

Otros son Queen, Led Zeppelin, Guns N Roses, esos son los principales a nivel de rock. En música clásica pues Bach, Mozart, Beethoven