La empresa micológica Laumont adelanta dos semanas su cierre en Valladolid

«Dentro de lo que cabe estamos contentos porque se aproxima a lo que pedíamos inicialmente, que eran 33 días. La empresa comenzó en 22 días y finalmente se cerró en 29», explican los trabajadores, quienes atribuyen el adelanto del cierre a las tensiones generadas en los últimos días (el pasado miércoles iniciaron una huelga indefinida, que concluyeron el viernes tras llegar al acuerdo).

De esta forma, siete de los ocho empleados fijos de Laumont en la capital vallisoletana aceptaron una salida de 29 días por año trabajado, mientras que uno de ellos se decantó por el traslado a Cataluña, a la localidad e Tárrega, donde la entidad trasladará toda su producción desde marzo. Este lunes los empleados han vuelto a su puesto de trabajo y la empresa ha funcionado con normalidad. «Sabíamos que el cierre se iba a dar y solo pedíamos unas garantías que cubrieran unos mínimos», añaden.

Laumont, cuya producción se divide entre las elaboraciones con seta y con trufa, alegó únicamente una motivación empresarial para su cierre en la ciudad. «Queremos tener un solo centro productivo y ahorrarnos en estructura, logística...», recalcó entonces el CEO de la empresa.

Precisamente en Valladolid se encargaban de la parte micológica, con ampliación de plantilla, siempre temporal, en las campañas de recolección de setas. «Depende de la época del año, podíamos ser hasta cien empleados», lamentan los trabajadores.

Asentada en Valladolid desde hace casi treinta años, Laumont, con presencia nacional e internacional, tiene la otra rama de su negocio con los elementos relacionados con la trufa, trabajados únicamente en las instalaciones de Tárrega.