Valladolid

Un día sin agua en Arturo Eyries: «Nos estamos apañando como podemos»

«A mí no me han avisado por ninguna vía, ni me he enterado hasta esta mañana que he intentado dar el agua», se queja una vecina de la zona. Otros vecinos han tenido más suerte y se han enterado por otros medios con algo más de antelación. «A mí me avisaron ayer por el grupo de WhatsApp de la asociación de vecinos. Pero si es cierto que no nos han puesto una circular en el portal», explica una vecina de otro bloque, esclareciendo que de esta manera mucha gente del barrio no estaba al tanto de la situación.

Ni rastro de circulares ni avisos por los portales afectados, al menos, en esta ocasión. «Hace dos semanas nos notificaron otro corte de agua en el barrio», añade Blanca, una vecina que afirma que en esos días sí se entregó una circular para avisar a todos los afectados. Por el momento solo queda «apañarnos como podamos».

Ha sido tal la confusión que hasta en los propios bares del barrio se rumoreaba que aún no habían cortado el agua a primera hora de la mañana. «Todavía no han debido de cerrar el grifo, pero por si acaso ya nos hemos duchado con antelación para que no nos pille de sorpresa luego», explica Juan, vecino de la calle Chile. Para la hostelería este corte ha supuesto prepararse con antelación ante cualquier contratiempo.

Es el caso de la cafetería Bar lladolid, que tras enterarse ayer a última hora de los cortes de agua cambiaron los planes a toda prisa. «Me tocó llamar corriendo a las nueve de la noche a Candelas para que vinieran los técnicos a conectar la cafetera a botellas de agua mineral», apunta Margarita González, camarera del local. «Anoche estábamos llenando agua por todos los sitios», relata algo aliviada, ya que cuentan con reservas de agua mineral de sobra para el resto de la jornada.

Con los locales abasteciéndose de reservas de agua y los vecinos con más dudas que respuestas, son muchos los que se acercan hasta la avenida de Medina del Campo para preguntar a los obreros lo que todos quieren saber. ¿Cuándo volverá el agua?

«Antes de lo previsto», responde uno de los técnicos que se encontraba revisando una de las tuberías. «El corte para la mejora de la red es bastante complejo», explica el técnico principal de la instalación. El caso de Arturo Eyries es especial, ya que la configuración del barrio hace que la mayoría de tuberías estén conectadas entre sí y cuando se produce un corte el barrio al completo se queda sin agua. A lo largo de la mañana los trabajos han ido avanzando adecuadamente, pero los técnicos no se atreven a descartar «futuros imprevistos» que alarguen el temporizador de sequía en el barrio. «Hay que tener en cuenta que hay cosas que no podemos controlar como problemas de logística que puedan surgir con el temas de los tractores», señala el técnico, quien afirma que han empezado por los trabajos más complejos para librarse de sustos al principio.

Este proyecto, que por las caras de sorpresa de los vecinos parece una novedad, se lleva trabajando desde finales del año pasado. El objetivo, renovar el material de las tuberías, que por el paso del tiempo ya estaban muy desgastadas.Primero se empezó desde el inicio de la calle Chile con la calle Argentina realizando un trabajo de renovación de redes de agua. «Se quiso meter una canalización totalmente nueva. Las tuberías están hechas de fibrocemento, y se van a sustituir por canalizaciones de fundido», apostilla el un técnico de Aquavall.

En la calle Chile ya se han instalado 433 metros de estas nuevas tuberías y en la calle Colombia 100 (533 en total). «Ahora solo queda conectarlas en la avenida de Medina del Campo», el lugar por donde entra el agua de todo el barrio. Es así como han conseguido unir los trabajos que se venían realizando en el año 2023 en toda la calle Chile a la red actual. Las horas siguen pasando y el margen de 12 horas se estrecha. «Estamos conectando una zona antigua con una nueva. Puede que una pieza falle, es imprevisible», apunta el técnico, explicando que, en estos casos, se intenta dar un margen mayor del que realmente es.

Hay algunos que gestionan esta incertidumbre temporal mejor que otros. Luis Domínguez, vecino de la comunidad de la calle Bolivia opina que «la obra era muy necesaria, esto no se hace de la noche a la mañana». A todo esto se le suma que Luis está metido en temas de la comunidad y tiene que estar pendiente de la hora más que cualquier otro. «Tengo que coordinarme con el fontanero para llenar el depósito de las viviendas», explica. Aún así, el vecino recalca que «han avisado con el tiempo suficiente para que la gente supiese que no iban a tener agua hoy».

La circular no ha llegado a los portales de la vivienda, pero sí a las puertas del Mercatiendas Eyries. «A todo el mercado nos han avisado con un papel pegado en cada establecimiento y otro en la puerta principal», concreta Sonia, la camarera del Bar Ecuador, que al igual que sus compañeros ha tenido una mañana movida. «Estamos comprando cada dos por tres agua y llenando baldes desde las nueve de la mañana», explica. Este ajetreo no es lo único que ha llegado a las puertas del mercado. Varios vecinos de la zona se han acercado a preguntar sobre los cortes de agua. «Vienen aquí y se enteran por el propio boca a boca, muchos no tenían ni idea de qué pasaba», concluye.

«Este año no se harán más cortes de suministro en la zona», explica el gerente de la compañía, Pedro Arroyo. Esto supone un alivio para muchos vecinos de Eyries, que dos horas antes de lo previsto, a partir de las seis de la tarde, ya cuentan con agua en sus domicilios con total normalidad.