Cuatro centros de salud cierran por las tardes en Valladolid ante la falta de profesionales

Pocos profesionales hay que no terminen cada jornada a partir de las cinco de la tarde en lugar de a las tres, y así, aseguran, llevan meses. A lo que se suma el «abandono» a la atención a domicilio y la presencial por la impotencia de lo imposible.

Y es que solo por infección por coronavirus hay en Castilla y León 2.571 profesionales de baja laboral; de ellos, 570 son de AtenciónPrimaria. La inmensa mayoría son sanitarios, entre los que hay 166 médicos y 189 enfermeros.

Los números de Valladolid son especialmente negativos. Están en aislamiento por coronavirus 516 profesionales y 98 trabajan en el ámbito de Primaria (38 médicos y 28 enfermeros, entre ellos). Con esta restricción de personal, junto a las bajas por contingencias y enfermedades normales, algunos ambulatorios ya no tienen fuerzas para soportar la presión asistencial ni posibilidad de dar cobertura, sin sustitutos, a tales carencias. Por ello, la opción es la de cerrar los centros por las tardes y agrupar toda la asistencia en horario matinal. En este momento, están en tal situación cuatro centros: Barrio España, de la zona Este de Salud; y Delicias, Arturo Eyries y Parquesol, en la Oeste. Este último además con un brote que afecta a cinco profesionales –aunque uno se contagió fuera mientras estaba de vacaciones– que ha dificultado aún más la asistencia. Hasta la fecha, los centros de salud de la provincia suman ya 249 contagiados por covid; aunque 151 ya están dados de alta.

La Consejería de Sanidad explica que el cierre en horario de tarde «no es algo generalizado» sino que se está haciendo en los centros de salud con muchas bajas de profesionales. «Se suspenden las consultas de tarde y se pasan a horario de mañana hasta que se incorporen los de baja. Una medida puntual, en definitiva, para garantizar la atención».

En el ámbito de la asistencia sanitaria son los médicos y enfermeros, también los que están en formación, los que más sufren la transmisión de este virus y en los hospitales es además muy frecuente entre los auxiliares sanitarios.

El problema de la falta de profesionales está muy arraigado en el sector, desde hace años, y agudizado actualmente por la frecuente jubilación de los profesionales. Además, la posibilidad de contratar a facultativos que ya han dejado la vida activa «es importante, porque salvo que quieran ser voluntarios, para poder contratarlos tendrían que renunciar a su jubilación durante el tiempo que trabajaran y se encuentran con una situación difícil, sin garantías», explican fuentes sanitarias.

Desde el sindicato de enfermería Satse, en Valladolid, se denuncia la falta de enfermeros para la apertura de nuevas plantas en el edificio Rondilla «debido a las malas condiciones laborales que se ofrecen». Estas unidades ya acogían ayer a 68 pacientes. El sindicato denuncia que se recurre a profesionales delClínico donde ya están sobrepasados.

La pandemia sigue su ruta con fuerza, pero comienza a dar señales de estancamiento. Ayer volvía a sumar otros 2.206 contagios, una cifra más baja que la jornada anterior, 505 casos menos;pero todavía muy elevada. Además hubo que lamentar 39 fallecimientos; de ellos, 37 en los hospitales y dos en residencias.

Un repaso por la incidencia a 14 y a 7 días también muestra luces. En este último plazo, sigue con una tendencia a la baja que ayer se frenó en 671,55 casos por cada 100.000 habitantes, 26 menos que la jornada anterior y en un moderado pero consolidado descenso desde un pico de 721,14 casos el pasado 23 de enero, jornada con marcado aumento en las notificaciones diarias, que fue de 3.187 positivos. Y, por fin, también cede ligeramente las tasas a dos semanas, que se sitúan en los 1.405 casos.

Los hospitales siguen bajo una fuerte presión y sus UCI ingresaron ayer otros cuatro pacientes hasta los 292 y otros tantos en planta hasta los 2.005. Una fuerte presión pero aún muy por debajo de la primera ola, aunque superando los datos de la segunda.

Un repaso por la incidencia a 14 y a 7 días también muestra luces. En este último plazo, sigue con una tendencia a la baja que ayer se frenó en 671,55 casos por cada 100.000 habitantes, 26 menos que la jornada anterior y en un moderado pero consolidado descenso desde un pico de 721,14 casos el pasado día 23 de enero, jornada con marcado aumento en las notificaciones diarias, que fue de 3.187 positivos. Y, por fin, también cede ligeramente las tasas a dos semanas, que se sitúan en los 1.405 casos.

Los hospitales siguen bajo una fuerte presión y sus UCI ingresaron ayer otros cuatro pacientes hasta los 292 y otros tantos en planta hasta los 2.005. Una fuerte presión pero aún muy por debajo de la primera ola; aunque superando los datos de la segunda.