El cepillo digital salva las colectas en Valladolid

El cómputo de ingresos que presentó Conde del año 2020 (19,2 millones de euros) es «muy similar» al de 2019 (19,5 millones de euros), aunque destacó que la principal diferencia se encuentra en las aportaciones de los fieles, que han pasado de 5,09 millones de euros en el año prepandemia, a los 4,1 millones en 2020. «Sobre todo se han reducido las colectas, con una disminución cercana al 20%. Esto se debe a que durante tres meses las iglesias estuvieron cerradas y tras su apertura hubo importantes reducciones de aforo», dijo.

La pandemia mermó la recaudación del cepillo de las parroquias, pasando de los 2,1 millones de euros en 2019, a los 1,7 millones en 2020. En ese sentido, el ecónomo hizo especial hincapié en el impulso que durante el 2020 han tenido los donativos efectuados a través de 'Dono a mi Iglesia'. Se trata de un portal web que permite la realización de transferencias 'on-line' a una parroquia o seminario concreto, a una diócesis o a la Conferencia Episcopal. «A través de este portal, en 2019 se recaudaron 6.000 euros, mientras que, en 2020, y a pesar de la pandemia, fueron cerca de 100.000. En el presente ejercicio, hasta el mes de octubre, llevamos unos 50.000 euros recaudados.

Han disminuido también los legados y herencias y los ingresos por servicios (bodas, bautizos, comuniones y misas por difuntos). Así, explicaron que en 2019 se celebraron 3.000 comuniones y 1.900 bautizos, mientras que en el 2020 se celebraron 2.589 comuniones y 932 bautizos.

En el apartado de gastos, se detalló que los referentes a las actividades asistenciales realizadas desde las parroquias descendieron cerca del 40% . En cuanto al salario que percibe el clero, la partida se ha reducido de 2.952.644 euros en 2019 a 2.936.151 en 2020. El ecónomo remarcó que los 245 sacerdotes con los que cuenta la Diócesis tienen un sueldo base que es acorde al salario mínimo interprofesional. «En el medio rural, un sacerdote que lleve cuatro pueblos cobra el sueldo base y por cada cuatro pueblos más, recibe una cantidad a mayores y el kilometraje aparte. Un cura cobra unos 1.100 o 1.200 euros mensuales. Hay también sacerdotes que están jubilados que siguen cumpliendo su misión pastoral y se les da una ayuda para completar la pensión». Ahí, Blázquez hizo un inciso recalcando que no ha recibido quejas de sacerdotes indicando que esa cantidad sea insuficiente para vivir. «Siempre hay situaciones excepcionales, y en ese sentido, estamos atentos para adelantarnos a ellas. No hay quejas», recalcó.

Los gastos totales de 2020 ascendieron a 19.224.990 euros frente a los 19.562.710 euros del año anterior. Cifras, que según aclaró el ecónomo, propician que la capacidad de financiación de la Diócesis siga siendo «muy estable».

El arzobispo aprovechó para explicar el sentido de la celebración del Día de la Iglesia Diocesana. «En Valladolid formamos una comunidad de fe en la que todos tenemos derechos y deberes, y en la que deseamos colaborar y vivir. Somos una gran familia», dijo.