Así ha sido la búsqueda dentro de la cueva para encontrar a Paloma Bombín y Alfonso Urrutia

La búsqueda para encontrar a la vallisoletana Paloma Bombín y al salmantino Alfonso Urrutia, a los que se les perdió la pista el pasado sábado cuando realizaban una ruta de espeleología en una cueva de Soba en Cantabria, ha concluido. El despliegue se ha incrementado esta misma mañana cuando un grupo de la UME se ha adentrado en las cavidades de la cueva para peinar los alrededores y dar con el paradero de la pareja. La búsqueda no se ha limitado solamente al interior, si no que el equipo ha trabajado fuera de la cueva por si la pareja hubiese salido en algún momento y no tuviera cobertura.

Los efectivos de la UME y el GREIM se han enfrentado a una búsqueda en 40 kilómetros de vías alternativas por las que podían estar perdidos los espeleólogos. En un principio, los rescatadores daban por hecho que encontrarían a los desaparecidos en la travesía principal de la cueva, pero al no ser así se ha desplegado también un amplio equipo por las zonas de acceso y las posibles salidas.

La travesía a la que se enfrentaban «requiere mucha condición física y mental», tanto es, que la ruta de búsqueda sin realizar ninguna parada se completaría en unas 20 horas. La ruta de la Garmaciega está planteada en forma de 'U' con dos bocas -entrada y salida-, es compleja, fría (a cuatro grados) y tiene una travesía de unos 500 metros de desnivel en descenso.

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