Una avería siembra el caos en Chamartín y retrasa un tren procedente de Valladolid

Los trenes de alta velocidad con origen/destino en la estación madrileña de Chamartín han registrado importantes retrasos durante toda la mañana hasta mediodía por una falta de tensión en catenaria en esta estación. El problema técnico afectó a la salida y llegada de convoyes desde antes de las doce de la mañana, hasta que a mediodía ADIF informaba de que la avería estaba solucionada y que se está recuperando de forma gradual la circulación. El administrador ferroviario no aclaró si la incidencia estaba relacionada con las obras de ampliación de la terminal madrileña, que se desarrollan desde hace casi dos meses. Al menos uno de los servicios procedentes de Valladolid se vio afectado por la incidencia, según narraba un usuario en X: «El tren de Valladolid a Madrid de las 12.05 sigue en el andén y son las 13.15. @Adif_es tiene cortada la energía en Chamartín. Ya teníamos que estar en casa».

A las 14:12 horas llegaba el esperado mensaje desde la cuenta de información de Adif: «Está solucionada la incidencia que afectaba a la tensión en catenaria en Madrid Chamartín. Desde este momento, se recupera de forma gradual la circulación de los trenes de alta velocidad con origen/destino Madrid Chamartín-Clara Campoamor».

Los problemas en los trenes vuelven a repetirse una vez más. Hoy, el caos ha llegado por la caída de tensión en una catenaria en Madrid, que ha provocado que un tren AVE procedente de Alicante se quedara parado en el túnel que Nuevos Ministerios y Chamartín.

Los viajeros del tren denuncian que llevan horas atrapados en el interior de los vagones. Ante la falta de soluciones y pese al peligro que conlleva, algunos de ellos han decidido abrir las puertas y salir al túnel para tratar de llegar a la calle.

Decenas de viajeros de un AVE que salió a las 8.35 horas de Alicante rumbo a Madrid han permanecido atrapados en el tren desde que, poco después de las 11 y a punto de llegar a la Estación de Chamartín, se quedó parado. Una avería en la catenaria. Pasadas las 13 horas, el vehículo continuaba inmovilizado, con los pasajeros dentro, sin aire acondicionado. Los termómetros en la capital de España marcan 30 grados. El nerviosismo comenzó a hacerse patente dentro del tren cuando algunos pasajeros perdieron la calma y se bajaron del AVE.

Desde Adif se ha comunicado a los usuarios que ha habido un problema de tensión eléctrica. El personal del tren pasó un largo tiempo asegurando a los clientes que el problema se iba a solucionar, pero lo cierto es que no no se retomó la marcha hasta las 13.51 horas. Se iba a realizar un trasbordo a otro tren que, finalmente, no se ha producido, a pesar de que se habían realizado las maniobras para realizar el traslado de los viajeros. La tripulación tuvo que manejar una situación verdaderamente complicada, porque los pasajeros estaban cada vez más nerviosos.No era el único, a lo largo de la mañana no han dejado de pedir soluciones vía redes sociales -el único mecanismo que tienen muchos para alzar la voz-, desde distintos puntos del país. «Los que venimos de Valencia llevamos una hora y 15 minutos parados...», deslizaba Lucía. Javier, comentaba: «Un tren de Valladolid también anda parado a las puertas de Chamartín desde hace un buen rato... Y ya lleva una hora de retraso».

Desde Adif apuntaban que «la incidencia no ha afectado a las vías convencionales de Chamartín, por las que circulan trenes de Cercanías y Media Distancia». Y concluyen: «Inmediatamente los técnicos de Adif se han puesto a trabajar para resolver el problema. Ya se ha recuperado la tensión en la vía 1 del túnel, por lo que solo queda afectada la vía 19 (que sólo presta servicio en sentido Sur ya que la parte Norte está cortada por las obras) y las circulaciones han recuperado paulatinamente la normalidad.

En Chamartín, la situación no era mejor. Numerosos viajeros se han visto afectados por los retrasos y se agolpan en el interior de la estación. En los vídeos que circulan por redes sociales, los afectados denuncian que los servicios de atención al cliente ignoran la situación y que los responsables no dan explicaciones ni aportan posibles soluciones al problema.

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