Borrar
El exfuncionario municipal Luis Alberto Samaniego se dirige a declarar al juzgado durante la instrucción del caso. Ricardo Otazo
La Audiencia ultima los preparativos para juzgar a Samaniego por tráfico de influencias

La Audiencia ultima los preparativos para juzgar a Samaniego por tráfico de influencias

El lunes 11 arranca la vista oral contra el exfuncionario del Ayuntamiento de Valladolid y otros tres acusados por la adjudicación de obras municipales a sus empresas familiares

M. J. Pascual

Valladolid

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Jueves, 7 de marzo 2019, 18:53

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Audiencia de Valladolid tiene ya todo preparado para celebrar desde este próximo lunes 11, hasta el viernes 15 de marzo, el denominado caso Samaniego, que comenzó a investigar en 2014 los supuestos sobrecostes que el Ayuntamiento de la capital pagó entre los años 2000 y 2014 por la adjudicación de obras municipales realizada por el jefe del servicio de Mantenimiento, Luis Alberto Samaniego Conde, a sus propias empresas o de familiares. Para el exfuncionario municipal, la Fiscalía pide once años de cárcel por los delitos continuados de negociaciones prohibidas a funcionarios, fraude a la administración y falsedad en documento mercantil en concurso medial con otro de estafa. Además, la acusación pública solicita la inhabilitación para empleo o cargo público durante dieciocho años.

Más información

Junto al principal encausado serán juzgados también su hijo Luis Javier; su primo y expresidente de la Asociación Vallisoletana de Empresarios de la Construcción (Aveco) en la década de los ochenta, Antonio Bernardo Samaniego, que se enfrenta a la misma pena y el contable del grupo de empresas, Miguel Ángel Rodríguez Patín. Para cada uno de ellos, el ministerio público solicita ocho años de prisión. Además, si prospera la tesis de la Fiscalía, todos los acusados, de forma conjunta y solidaria, tendrán que pagar indemnizaciones al Ayuntamiento de Valladolid que suman 760.146 euros. La institución municipal ejercerá la acusación particular durante el juicio y tratará de demostrar que los sobrecostes superan los dos millones de euros, aunque según el cálculo de la Fiscalía no superarían los 800.000 euros.

Luis Alberto Samaniego fue designado el 1 abril de 2000, de manera provisional, jefe del centro de mantenimiento de edificios e instalaciones y diez días más tarde el pleno municipal aceptó la renuncia a la compatibilidad que tenía concedida desde 1985 para trabajar como arquitecto técnico. Samaniego se mantuvo en ese cargo de jefe de mantenimiento hasta que se jubiló en junio de 2014. Entre sus funciones, estaban las de dirección y supervisión de obras menores de remodelación, ampliación y reforma de los edificios municipales, la sustitución de elementos de obra civil que no afectaran a la estructura y la inspección y fiscalización facultativa y técnica de los trabajos realizados por empresas externas contratadas para trabajos de mantenimiento.

Según el escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía, el acusado, que decidía si las obras se realizaban por empleados municipales o si era necesario realizarlas a través de sociedades mercantiles ajenas al Ayuntamiento, se aprovechaba de que estas obras, al tratarse de contratos menores, no precisaban de procedimiento de contratación pública, y proponía que las ejecutaran las empresas que él mismo administraba, o lo hacían su hijo Luis Javier, su primo Antonio Bernardo o Miguel Ángel, administrador de alguna de las sociedades participadas por los otros tres acusados.

En 14 años, las empresas vinculadas al exaparejador presentaron facturas por obras municipales que suman casi diez millones de euros, con un sobrecoste de más de dos, según sostiene el Ayuntamiento

Entre los años 2000 y 2014, esa docena de sociedades realizaron obras por las que presentaron facturas al Ayuntamiento de Valladolid por valor de más de 9,6 millones de euros. Según la fiscal, una de estas empresas, Mantenimiento y Consolidación de Inmuebles SL «no contaba con trabajadores, siendo en realidad una empresa para concursar y participar en la adjudicación de obras y que, posteriormente, subcontrataba con otras dos empresas vinculadas a ella, que sí contaban con infraestructura para prestar estos servicios, Mantenimiento e Infraestructuras Urbanas SL y Constructora Castellana Industrial».

La creación de diez sociedades sin trabajadores cuyos únicos ingresos procedían del Ayuntamiento de Valladolid fue sucesiva entre 2008 y 2014. Así, indica la acusación pública, Samaniego, aprovechando su puesto de jefe de mantenimiento, «aprovechando sus facultades en los contratos menores de propuesta de ejecución por empresas externas y puesto de acuerdo con el resto de los acusados, se ha beneficiado directamente de esas adjudicaciones y ha beneficiado al resto de los acusados, sin cuya concurrencia no habría podido hacerlo«. Tanto, que en ese periodo inflaron los precios de los servicios prestados «siendo muy altos, e incluso excesivos en algunos casos». La facturación con sobrecoste de las facturas revisadas ascendería a 671.877 euros, pero también se facturaron trabajos «que, en realidad, no fueron realizados« y que se facturaron al Ayuntamiento «con facturas ficticias» por valor de 88.269 euros.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios