Los andamios cubren el lateral de la Catedral de Valladolid

Los plazos de estas primeras actuaciones estarán supeditados a su avance, puesto que además se aprovechará este despliegue de las estructuras a lo largo de la Catedral para llevar a cabo una «reparación urgente» en el edificio contiguo al bloque histórico. En concreto, según señalan estas mismas fuentes, las fuertes tormentas del pasado 3 de junio que inundaron y colapsaron el centro de Valladolid -precisamente la plaza de Portugalete fue de los entornos más damnificados- hundieron el falso techo de una de las habitaciones y se sacará 'provecho' a estas obras para repararlo.

Se trata de unos trabajos con los que ya contaba el Arzobispado de Valladolid para llevarlos a cabo de manera previa al lavado de cara y restauración a la que se someterá la Catedral durante los próximos meses. Este último proyecto comenzará en verano y, si nada se tuerce y se cumplen los plazos previstos, las obras se prolongarán durante dos años y medio.

Con un presupuesto de 6,4 millones de euros, sufragados por Arzobispado, Ayuntamiento, Junta y Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, la intervención girará en torno a cuatro pilares fundamentales. Uno de ellos es el Museo Diocesano y Catedralicio, es decir, la apertura del centro a través del Patio de los Cipreses junto con su renovación y modernización museográfica. También la creación de la gran biblioteca, así como la reforma de la Puerta de Santa María.

En concreto, la modernización del actual museo implicará un nuevo diseño en el que se contemplarán mejor las obras que en él se custodian. Asimismo, contará con una nueva sala y se reubicará la entrada y la salida, de forma que podrá ser visitado también en horario de culto.

Por otra parte, la remodelación de la Puerta de Santa María facilitará el tránsito de las procesiones de Semana Santa y otras celebraciones religiosas. La disposición del espacio diáfano de encima de las capillas del lado del Evangelio, por su parte, permitirá la creación de una Biblioteca Histórica de la Archidiócesis de Valladolid con fondos, entre otros, de la Biblioteca Capitular y la Biblioteca del Seminario Diocesano.

Será un espacio de más de 800 metros cuadrados que estará conectado con el exterior, por medio de unas escaleras y un ascensor que darán acceso a este nuevo espacio desde Portugalete que estará integrado en la fachada lateral.