
El Adaja continúa en alerta y mantiene anegada la ribera entre Valladolid y Villanueva de Duero
Su tendencia, al igual que la del Eresma, es ya descendente después de alcanzar un pico cercano a los cien metros cúbicos por segundo
El último río de la provincia que continuaba este sábado en situación de alerta por su elevado caudal, el Adaja, mantenían anegadas sus riberas –lejos de fincas y núcleos habitados– desde la unión con el Eresma, entre Matapozuelos y Valdestillas, y su desembocadura en el Duero a su paso por la capital (al borde de la urbanización Los Doctrinos) y Villanueva de Duero.
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La tendencia de su caudal, que a media tarde arrastraba un notable caudal de 72 metros cúbicos por segunda –la punta, de 99,9, la alcanzó el viernes–, era ya descendente, aunque se mantenía por encima de su nivel de alerta, al igual que el Eresma, aunque con la misma tendencia, aguas abajo desde Segovia. El Duero, a su vez, solo estaba ayer en alerta en la salida del embalse de la Cuerda del Pozo (Soria).
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