Chávez recibe a Maradona en el palacio de Miraflores. :: F. LLANO-AP
MUNDO

Hugo Chávez rompe relaciones con Colombia y decreta la alerta máxima

Caracas anunció su decisión tras exigir Bogotá a la OEA que investigue la presencia de líderes guerrilleros en territorio venezolano

CAROLINA VILLAR

Viernes, 23 de julio 2010, 02:50

Publicidad

«No nos queda, por dignidad, sino romper totalmente las relaciones diplomáticas con la hermana Colombia, y eso me produce una lágrima en el corazón. Espero que se imponga la racionalidad en la Colombia que piensa». Así puso fin el presidente venezolano, Hugo Chávez, a la escalada de tensión vivida entre Caracas y Bogotá en los últimos días, tras las acusaciones del Gobierno de Álvaro Uribe de que guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) se esconden en el país vecino.

El líder bolivariano hizo el anuncio ante las cámaras durante la visita del seleccionador argentino, Diego Armando Maradona. Además, explicó que ha ordenado el estado de «máxima alerta» en la frontera, ante el riesgo de que su homólogo colombiano, movido por su «odio a Venezuela», pudiera optar por una acción militar en esa región. «Uribe es una amenaza para la paz antes de entregar el Gobierno, porque es capaz de cualquier cosa, incluso de mandar montar un campamento falso en Venezuela para bombardearlo y provocar una guerra. Lo alerto, es capaz de cualquier cosa», argumentó. Asimismo, acusó al inquilino de la Casa de Nariño de querer irse «destruyendo todo porque ha fracasado como presidente».

Tras predecir las intenciones de Uribe, Chávez tendió una mano a Juan Manuel Santos, que asumirá el poder el 7 de agosto. «Esperemos que el presidente electo contribuya a que se retome el camino de la razón en Colombia y a que no ocurran cosas más graves en los próximos días». Insistió en que, a pesar de las diferencias ideológicas con Santos, confía en que tenga un «talante constructivo y de respeto que permita reuniones conciliadoras».

Tan pronto como rompió relaciones, el mandatario venezolano se apresuró a buscar una solución y aseguró que los encuentros entre funcionarios o cancilleres podrían resolver la situación en un plazo relativamente corto. También destacó la «gravedad de lo ocurrido» ayer, en la sesión extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA), en Washington, donde los «agravios e injerencias» del embajador de Colombia, Luis Hoyos, ante el organismo, le obligaron a cortar los lazos con su vecino.

Publicidad

Decisión errónea

El diplomático colombiano, por su parte, calificó de «errónea» la decisión del Gobierno venezolano y lamentó que no haga lo mismo con las «bandas criminales» como las FARC. Hoyos presentó ante el consejo permanente de la OEA pruebas de la presencia de líderes guerrilleros en Venezuela y afirmó que en ese país se esconden unos 1.500 rebeldes distribuidos en 87 campamentos. También solicitó que una comisión establecida por la institución verifique en un plazo de treinta días la existencia de estos emplazamientos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3€ primer mes

Publicidad