Las plagas se reparten los barrios de Zamora
M. J. PASCUAL
Viernes, 5 de febrero 2010, 10:50
Las cucarachas prefieren acomodarse en las alcantarillas de San José Obrero y las palomas adoran los edificios deshabitados del entorno de la Plaza Mayor, aunque en el último año muchas se han mudado a la calle Candelaria Ruiz del Árbol. Las calles favoritas de las ratas no sólo son las del casco antiguo, donde proliferan los establecimientos hosteleros, sino que extienden sus dominios a calles con nombres de río, como Aliste o Almuceras. Los bichos, como si fueran bandas callejeras, se han repartido la ciudad con nocturnidad y alevosía, aunque siempre hay algún forastero desubicado, como la salamandra que apareció el año pasado en el colegio de la Villarina, un hábitat infrecuente para este particular anfibio que suele tener sus dominios en el barrio de San Frontis.
La intensificación de las campañas de sanidad ambiental en los últimos dos años ha servido para reducir en un 40% las plagas urbanas y, en el caso concreto de las cucarachas, en un 70%. Los avisos de vecinos recibidos en la Concejalía de Salud Pública sobre la aparición de estos insectos se redujeron a la mitad durante el año 2009.
En total, se han recibido en el último año 47 quejas de vecinos al servicio municipal, la mayoría en relación con las palomas (20). Le siguen las alertas por cucarachas (16), roedores (14) y avispas (13). A mayor distancia, las hormigas (9), pulgas (5), dípteros (1) y garrapatas (1). Los avisos por hormigas se han triplicado respecto del año 2008, «pero prácticamente se circunscriben a colegios, donde el exceso de las temperaturas en los meses de verano y la propagación de maleza en los patios han propiciado la presencia de estos insectos», explican en el servicio municipal de Salud Pública. Además de instalarse en los recintos escolares del Sancho IV, Las Viñas y Jacinto Benavente, los técnicos de Sanigest han tenido que aplicar tratamientos en la zona de Puerta Nueva, Rabiche, la Cuesta del Caño y Las Pallas.
La presencia de avispas alarmó en cinco colegios y hasta en la Oficina Municipal de Desarrollo. También se localizaron poblaciones importantes en las aceñas y el Castillo.
Pulgas
Las plagas de pulgas se reducen a las zonas más transitadas por perros, como el parque de Eduardo Barrón, la plaza del Sol, Las Pallas, la zona de petanca del barrio de Pinilla e incluso han aparecido en la nave de la Policía. Las garrapatas, por su parte, se hicieron un sitio en el parque de la Alberca, y más concretamente en la intersección de la carretera de Cubillos. Lo que no hubo el año pasado fueron topillos.
Fueron más las quejas de particulares al detectar ratas. Las aceñas de Olivares, que han estado cerradas prácticamente todo el año, son un buen sitio para que aniden los roedores. También se dio aviso de su indeseada presencia en los jardines de la Cuesta del Bolón, el barrio de Rabiche, en dos tramos de muralla, uno en la Feria y otro en la calle Balborraz y, sobre todo, cuando asomaban los bigotes por las arquetas de alcantarillado situado en las calles Condes de Alba y Aliste, Lope de Vega, Cardenal Mella, plaza de San Antolín y Puente.
El control de la población de palomas es otro de los trabajos que realiza la adjudicataria del servicio. Respecto del año 2008, son 527 ejemplares más los recogidos en las 15 trampas habilitadas en edificios abandonados o deshabitados de la ciudad. En total, durante el pasado año se han capturado 3.368 palomas, un 15% más. Mayo fue el mes en el se produjeron más capturas, sobre todo en un inmueble abandonado de la calle Candelaria Ruiz del Árbol. El incremento en el número de capturas, indica el veterinario municipal, Esteban González, obedece a que hay más inmuebles abandonados o vacíos a disposición de la empresa de control de plagas, «de manera que se han colocado jaulas en casi todos los lugares desde donde se han recibido quejas, al ser viable su instalación y al ser aceptadas por las aves».
Legionela
En total se han realizado 140 intervenciones sanitarias, entre las programadas por la Concejalía y las solicitadas por particulares. Los tratamientos DDD se realizan periódicamente en los mercados, el centro municipal canino y los evacuatorios, los pabellones deportivos, los parques de bomberos y Policía Municipal, el cementerio, los colegios públicos, las aceñas y departamentos municipales. También se actuó en el barrio de Carrascal.
Hay también una campaña específica para la prevención y detección de la legionelosis. Las fuentes públicas, las duchas de pabellones deportivos y las piscinas se desinfectan y se realizan analíticas.
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