La lluvia obliga a suspender la primera procesión de Palencia

Mucho mirar al cielo, mucho consultar las aplicaciones meteorológicas del teléfono y mucho lamento en la sede de la Hermandad de la Sentencia, que se ubica ahora en la calle Árbol del Paraíso. Reunidos allí los cofrades, la junta directiva no tuvo más remedio que anunciar la noticia más temida, la suspensión del primer desfile procesional del ciclo palentino y el único que organiza esta hermandad.

Pero los cofrades, que no han dejado de mirar los partes meteorológicos en los últimos días, ya habían previsto esta contingencia, con lo que se tenía preparado un acto litúrgico en la sede canónica de la cofradía, la capilla de la orden de las Agustinas Recoletas, ubicada en la calle Jorge Manrique, muy próxima a la Catedral.

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La suspensión causó un hondo penar en los cofrades, especialmente entre los costaleros, que llevan meses de ensayos y esfuerzos, esperando para cargar por las calles palentinas a Jesús de la Sentencia, un talla de Ventura Gómez Rodríguez, fechada en 2011. Es el único paso que se traslada a costal en toda la Semana Santa de Palencia y a pesar de que se trata de una de las procesiones más jóvenes ha adquirido una notable presencia debido a esta particularidad y al hecho de que es el desfile penitencial con el que se abre la Semana Santa de la capital palentina.

Ya en la capilla, una vez que los costaleros devolvieron la imagen de Jesús a su trono habitual, los hermanos representaron la lectura de la sentencia con la que Pilatos condenó a Cristo, acto que debería haberse celebrado a la altura del Casino, en la Calle Mayor. Posteriormente, se rezó una oración por los difuntos y se cantó la Salve a la Virgen de la Esperanza. El acto litúrgico estuvo acompañado por los sones de la Banda de la Santísima Trinidad.