Veinte de los 130 kilómetros de la red de agua potable están pendientes de renovación

El Ayuntamiento, a través del plan de renovación, da pasos en limar esas redes de fibrocemento que a menudo originan averías en distintos puntos del casco urbano. Interviene cuando el presupuesto lo permite, y es lo que esta semana ha empezado a hacer en cuatro calles de dos barrios de la capital: Santa Catalina y Cardenal Zúñiga en San Lorenzo, y Lérida y Alfonso VI en La Albuera. Desde este pasado lunes, las cuadrillas de obreros y las máquinas preparan los trabajos de sustitución de las conducciones de agua potable. «Son tareas preliminares de fresado del asfalto para hacer las zanjas y cambiar las tuberías», explica Merino. Una vez hecha la renovación y la instalación, se procederá a la fase de relleno, se apisonará el firme y se cubrirá con hormigón.

Entre las cuatro, el Ayuntamiento de Segovia tiene previsto cambiar las conducciones a lo largo de un total de 1.287 metros, a los que se añadirán los que se resten de las obras a desarrollar en otras vías de la ciudad, algunas de ellas incluso están a punto de acabar.

El concejal divide esta serie de intervenciones en el viario pública en dos. Por un lado, cita las arterias que además de renovar la red de agua se acometerá su asfaltado; y por otro, las que «cuentan con su propio proyecto por las circunstancias que las rodean, porque hay otra administración implicada o por la dificultad que entrañan».

En este último grupo están, por ejemplo, los trabajos que se han efectuado recientemente en el Camino de la Huerta, «donde están ya con los remates», precisa el concejal Obras, Servicios e Infraestructuras.

También en ese segundo conjunto de calles para las que se ha diseñado un proyecto individual figura Agapito Marazuela, cuya firma del contrato de adjudicación es inminente, tanto que Miguel Merino avanza que las obras podrán comenzar entre finales de este mes o principios de septiembre. El representante municipal mete en este grupo de calles con propuesta propia a la carretera de Villacastín. El concejal bosqueja que las características de esta vía obligar a dividir la intervención en dos fases. Primero se acometerá la renovación de tuberías en el tramo más cercano a Obispo Quesada, y luego se actuará en el que desemboca en la zona del Puente de Hierro.

En cuanto a las obras que han empezado esta semana en La Albuera y San Lorenzo, el concejal especifica que no solo se trata de renovar las antiguas conducciones de fibrocemento, sino que además se intenta «mejorar el diseño de la red al realizar nuevos mallados y conexiones», lo que supone un «enorme esfuerzo inversor», subraya Merino. En esta ocasión la inversión total alcanza los 217.000 euros y el plazo de ejecución previsto es de mes y medio en cada una de las cuatro calles en las que los obreros y las máquinas han empezado a intervenir. El Ayuntamiento de la capital calcula que las reformas que se acometan en estas semanas beneficiarán a una población de unas 2.700 personas.

En Alfonso VI, la renovación afecta a 360 metros de tubería entre las calles Cardadores y Pascual Marín, para lo que se utilizará una nueva conducción de hierro fundido de 150 milímetros de diámetro, detallan fuentes de la Concejalía de Obras, Servicios e Infraestructuras. Estos trabajos reducirán la longitud de las acometidas existentes, que quedarán renovadas, y se mejorará el mallado de la red en la zona. Las obras contemplan la instalación de tres bocas de riego para el baldeo de calles y de dos hidrantes contra incendios, así como la de un grifo tomar muestras del suministro.

En lo que respecta a la calle Lérida, se sustituirá la conducción de fibrocemento por otra de fundición, también de 150 milímetros de diámetro. Los trabajos que se desarrollarán estas semanas implican al tramo comprendido entre Andrés Reguera Antón y Bomberos, un recorrido de 360 metros de tuberías.

Además, y para mejorar el mallado de la red y la entrada de agua en el barrio de La Albuera-El Carmen se incluirá una nueva conducción de polietileno a lo largo de la calle La Luz, entre Lérida y Campo. La intervención incluye la renovación de las siete acometidas domiciliarias que existen en la zona. Durante toda la obra quedará cortado el carril del sentido de circulación hacia el mercado municipal de La Albuera, pero se habilitará el otro en sentido contrario al habitual, lo que permitirá que no se interrumpa el servicio de las líneas 3 y 4 de los autobuses urbanos.

La actuación que ha empezado a ejecutarse en Cardenal Zúñiga afecta al tramo comprendido entre las calles Echar Piedra y el paseo de Santo Domingo de Guzmán, de 342 metros de longitud. Al igual que en los casos anteriores, se empleará tubería de hierro fundido y también se incluye la colocación de tres bocas de riego, dos hidrantes y un grifo para la toma de muestras de la red.

También en San Lorenzo, en la calle Santa Catalina, la renovación del suministro de agua potable se va a llevar a cabo a lo largo de toda la arteria, entre el cruce con la avenida Vía Roma y los Vargas, lo que supone 190 metros de longitud. La vieja tubería de fibrocemento de 100 milímetros de diámetro se cambiará por una de polietileno de alta densidad de diámetro nominal 110 milímetros. Para los catorce ramales se emplearán también conductos de polietileno de diámetros comprendidos entre los 32 y 63 milímetros. Se añade –según el Ayuntamiento– la instalación de dos nuevos hidrantes, tres bocas de riego y un grifo para la toma de muestras.